El grupo alemán Daimler cerró el ejercicio pasado con un beneficio neto atribuido de 2.377 millones de euros, lo que representa una fuerte caída del 67% en comparación con las ganancias de 7.249 millones de euros del año previo, según informó la empresa, que está inmersa en un plan de transformación que contempla el recorte de plantilla en todo el mundo.
El presidente de Daimler y de Mercedes-Benz, Ola Källenius, aseguró que el futuro de la empresa reside en una movilidad neutral en emisiones de dióxido de carbono (CO2) y en la digitalización. Para lograr este objetivo, el directivo apuntó que la corporación ha impulsado "significativamente" las inversiones en nuevas tecnologías.
"Estamos comprometidos con materializar nuestro liderazgo tecnológico al tiempo que mejoramos de forma significativa la rentabilidad. Para este fin, son necesarias medidas como la reducción de costes y el incremento del flujo de caja", aseguró el directivo, que subrayó que Daimler llevará a cabo las acciones que sean necesarias para mejorar su posición financiera.
La multinacional alemana registró una cifra de negocio anual de 172.745 millones de euros en 2019, lo que supone una subida del 3% en la comparativa interanual, mientras que sus ventas mundiales experimentaron un retroceso del 0,2%, hasta 3,34 millones de unidades.
El beneficio operativo de la compañía automovilística se situó en 4.329 millones de euros al cierre del ejercicio pasado, lo que representa un desplome del 61% respecto a los 11.132 millones de euros contabilizados en 2018.
Por divisiones, Mercedes-Benz Cars logró unas ganancias operativas de 3.359 millones de euros el año pasado, un 53% menos, mientras que Daimler Trucks ganó 2.463 millones de euros, un 11% menos. Además, Mercedes-Benz Vans entró en pérdidas, con unos 'números rojos' de 3.085 millones de euros (312 millones de euros de beneficio en 2018).
Daimler Buses finalizó el año pasado con un beneficio operativo de 283 millones de euros, un 7% de crecimiento respecto a los resultados del año previo, al tiempo que Daimler Mobility disparó un 55% sus ganancias operativas anuales, hasta 2.140 millones de euros.
Plan estratégico
La compañía señaló que está inmersa en un plan estratégico basado en la neutralidad en emisiones de CO2. Así, apuntó que para alcanzar los objetivos de emisiones y para financiar las áreas de movilidad eléctrica y conectividad "son necesarios enormes esfuerzos técnicos y financieros".
"Los costes resultantes requieren amplias medidas para aumentar la eficiencia, racionalizar la empresa y aumentar el flujo de caja", destacó la multinacional alemana, que indicó que entre esas acciones se incluyen ahorros "significativos" en materiales y en costes administrativos.
La empresa prevé experimentar un ahorro de 1.400 millones de euros hasta 2022 en costes de personal, para lo que será necesario el recorte de puestos de trabajo en todo el mundo "de una forma socialmente responsable", incluyendo cargos directivos.
Para el año que acaba de comenzar, Daimler prevé que sus ventas se sitúen "ligeramente" por debajo de los registros de 2019, mientras que la facturación se mantendrá en un nivel "estable". No obstante, la multinacional adelanta un impacto negativo en sus resultados de 2020 por las medidas de reestructuración.
"Daimler continuará revisando sus actividades no estratégicas con el fin de concentrar los recursos financieros en los negocios con un mayor potencial económico", explicaron desde la compañía con sede en Stuttgart.