BYD mantiene una gran pelea con Tesla por ser el mayor fabricante de coches eléctricos del mundo. Pero, si miramos en todo el entorno de la compañía china, es capaz de ofrecer muchos más productos que los americanos. Aunque a Europa llegue convertida en una marca 100% eléctrica, en su país natal vende productos sumamente interesantes que bien podrían tener interés en el Viejo Continente. Esta misma semana han presentado una berlina híbrida enchufable capaz de rivalizar con cualquier fabricante europeo, tanto por calidad como por autonomía y rendimiento.
Se llama BYD Seal DM-i, un nombre familiar porque 'Seal' es el nombre que usa este fabricante para denominar a la berlina eléctrica que en los próximos meses llegará a Europa para plantar cara al todopoderoso Tesla Model 3. El Seal DM-i, anteriormente conocido en China como Chaser 07, cuenta con un diseño muy parecido al de la versión 100% eléctrica, aunque no es totalmente idéntico ya que ambos modelos están planteados para cubrir necesidades muy diferentes. En este caso, es necesario que el motor térmico respire, por lo que su frontal sufre ciertas modificaciones.
En el interior, también se pueden apreciar cambios, aunque BYD mantiene su apuesta por la calidad y la tecnología. La unidad PHEV cuenta con la instrumentación digital completamente carenada por un salpicadero clásico, mientras que el modelo eléctrico ofrece una pantalla individual separada. El panel del sistema multimedia, con un tamaño de 15,6 pulgadas, es el mismo en apariencia y funcionalidad. La pantalla gira automáticamente y cuenta con el último software de BYD que destaca, sobre todo, por ser uno de los más fluidos de la industria.
Dejando a un lado el tema de tecnología, que viene a ser el mismo, BYD no mantiene las proporciones entre el EV y el PHEV. La berlina híbrida enchufable es ligeramente más grande, alcanzando los 4,98 metros de largo, 1,89 metros de ancho y 1,49 metros de alto con una distancia entre ejes de 2,9 metros, 2 centímetros menos que el modelo eléctrico. Bajo el capó se instala un bloque de gasolina de 1.5 litros que se combina con un propulsor eléctrico y una batería de gran capacidad. Por ahora, se desconocen los datos concretos de autonomía y potencia de salida.
Lo que sí ha desvelado BYD es que el Seal DM-i ofrece dos rangos de autonomía eléctrica: 120 y 200 kilómetros. Dichas cifras hacen de él uno de los coches híbridos enchufables con mayor rango del mundo. Para hacernos una idea, actualmente Mercedes es el fabricante que más autonomía es capaz de imprimir a sus híbridos enchufables. Los alemanes superan cómodamente la barrera de los 100 kilómetros, pero el Seal los supera a todos. 200 kilómetros son muchos kilómetros para un híbrido enchufable. Supone una gran ventaja a la hora de hablar de eficiencia.
Un conductor medio en Europa recorre una media de 48 kilómetros al día. Con una berlina como el Seal DM-i podría cumplir casi todos sus trayectos diarios sin tener que recargar, teniendo a mano siempre la reserva del propulsor de gasolina. Lamentablemente, los europeos no llegaremos a ver esta unidad por nuestras carreteras, aunque resultaría de lo más interesante. En cuanto a precios, suponemos que el híbrido enchufable es ligeramente más económico que el 100% eléctrico, aunque BYD todavía no ha proporcionado datos concretos con respecto al precio.
