La transición hacia el coche eléctrico avanza sin freno, pero hay algo tan importante o más que vender modelos 100% libres de emisiones, y eso es que haya estaciones de carga disponibles en las ciudades.
Una en concreto, ha anunciado que en sus calles ya se pueden encontrar más puntos de recarga que surtidores de diésel y gasolina. Estaba claro que no podía ser una localización cualquiera.
Y es que la ciudad de la que estamos hablando es Shenzhen, que básicamente es el lugar en el que nació el fabricante BYD, puntero en desarrollo de automóviles eléctricos e híbridos enchufables.
De hecho, prácticamente es el único con las papeletas suficientes para superar a Tesla, y uno de los responsables de que China haya superado a Japón por primera vez en la historia en exportación de automóviles.
Ahora, Shenzhen también puede presumir de esta particularidad, un objetivo que se anunció hace uno meses, pues en junio de 2023 ya habían presentado propuestas de estaciones de carga con una solución que permite que se refrigeren mediante líquido.
Querían llegar a 2025 con más cargadores en sus calles que gasolineras y han cumplido bastantes meses antes de la fecha límite. Ya el pasado mes de abril, las autoridades de la ciudad china hicieron pública la existencia de 362 estaciones de recarga.
Y las hay tanto con potencias que permiten cargas rápidas, como supercargadores capaces de hacer posible las habituales recargas estándar (hasta el 80%) en unos 10 minutos. Están situadas en centros comerciales, polígonos industriales y junto a paradas de autobús, principalmente.
Hay que tener en cuenta que estamos hablando de una ciudad en la que viven 12,5 millones de personas, y en la que, según la oficina componente en materia de energía, se gestiona un volumen de carga de coches eléctricos de hasta 670 millones de kilovatios por hora, tal y como detallan los resultados del primer trimestre de 2024.
Unos datos interesantes, para un país que está a la cabeza en cuanto a crecimiento de vehículos cero emisiones, pero que también es líder en emisiones contaminantes para el medio ambiente.
El escenario de Shenzhen no es más que un ejemplo de lo que, tarde o temprano, pasará en otros tantos puntos del planeta, también en Europa y España. Los resultados recopilados en los últimos meses, ya hablan de un crecimiento de los puntos de recarga de nuestro país en un 40%.
El ejercicio 2023 cerró con 29.301 estaciones de carga, todavía lejos del objetivo europeo pero con un índice de crecimiento récord, en comparación con los años anteriores. Y 2024 ha arrancado de forma positiva, hasta los 32.300 puntos en el primer trimestre.
Además, las estaciones de carga con potencias por encima de los 22 kW, ya representan el 34% de todas las disponibles, y Cataluña, Madrid y Andalucía son los territorios con mayor infraestructura de recarga del país.