A medida que nos adentramos en la presente década se anuncian medidas más restrictivas para coches de combustión interna y se multiplica el número de coches eléctricos a la venta en todo el mundo. Además, conforme mayor se vaya haciendo la oferta éstos irán bajando su precio, lo que está haciendo que paulatinamente se acentúe el interés del público sobre ellos, y así lo acredita la agencia EY con su última encuesta.
EY se define a sí misma como una empresa multidisciplinar que desempeña sus labores en todo tipo de ámbitos y con sus servicios se encarga de que sus clientes (principalmente empresas) gocen de una mejor gestión de sus recursos. No es el primer informe o encuesta del que nos hacemos eco gracias a EY, pues anteriormente la compañía publicó un estudio en el que apuntaba que los coches eléctricos se popularizarán antes de lo esperado.
En esta ocasión EY se ha centrado en saber la intención de compra de los consumidores en lo relativo a vehículos eléctricos, con un interesante resultado que muestra que conforme al último estudio de este tipo del que tuvimos noticias ha aumentado significativamente el porcentaje de personas interesadas en adquirir un coche eléctrico como próximo medio de transporte personal, habiendo crecido en torno a un 10 %.
EY ha efectuado el análisis en 13 de los países más importantes del mundo, entre los que no han incluido a España pero sí países relativamente similares a nuestro país como Alemania, Reino Unido, Francia o Italia, y han hallado que más del 41 % del público pretende adquirir un coche eléctrico como siguiente vehículo, o al menos electrificado en algún grado, como híbridos o híbridos enchufables.
Por su parte, el interés en coches propulsados por pila de hidrógeno es nimio, pues tan sólo captan la atención del 2 % de los encuestados, mientras que el 8 % declara que aún tiene que informarse mejor acerca de lo que supone cualquiera de las nuevas alternativas. No obstante la nota discordante es que aún la mitad de los encuestados (exactamente el 50 % según EY) declara que su próximo vehículo estará alimentado por diésel o gasolina.
Ha comentado EY acerca de los resultados de su última encuesta: "La demanda de coches de todo tipo parece que va a diversificarse. El desafío tanto para los fabricantes de automóviles como para los distribuidores será capitalizar el interés de los consumidores en los sistemas de propulsión alternativos y persuadir a más compradores potenciales de automóviles nuevos para que sean ecológicos y que su próxima compra sea un vehículo eléctrico en lugar de un automóvil de combustión interna."
Es especialmente llamativo el hecho de que de ese 41 % que declara tener la intención de comprar un coche eléctrico, el 90 % dice que lo hará en un plazo menor a dos años. Cifras que se muestran acordes al estudio previo publicado por EY, donde apuntaban que para 2028 las ventas de coches eléctricos se habrán equiparado a las de los combustibles tradicionales.
También resulta interesante que el 78 % de aquellos que han declarado que no comprarán un coche de combustión interna dicen que tras su decisión el motivo es una mayor concienciación en torno al medio ambiente, ayudando a este hecho ver que durante la etapa de confinamientos más restrictivos los niveles de contaminación y emisiones disminuyeron significativamente.