El Tesla Cybertruck crea expectación allí por donde pasa. Y es que, aunque se hizo esperar, lo cierto es que su diseño y algunas de sus soluciones lo hacen único en sus especie.
Ahora el modelo pick-up ya está entre nosotros, o mejor dicho, en su mercado de origen principalmente, porque en Europa ha sido imposible homologarla por un tema de incumplimientos en materia de seguridad.
Saliendo de dudas acerca del Cybertruck
Como el lanzamiento se produjo hace relativamente poco, todavía hay algunas dudas sobre los procesos de fabricación y componentes de este modelo 100% eléctrico de Elon Musk. Aunque la gente de Munro está acabando con todas las incógnitas posibles.
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Y es que se han propuesto desmontar por completo la unidad del Cybertruck que tienen en sus manos, y ya han hecho públicos interesantes detalles. El que más interesa ahora mismo está relacionado con el paquete de baterías de nueva generación que usa la pick-up, lo que se conoce como celdas 4680.
Recientemente han abierto la caja que encierra las baterías eléctricas y han preparado un vídeo largo con las conclusiones que ha sacado del mismo. Pero una cosa ya está clara: el interior está lleno de huecos de aire, es decir, que el paquete está medio vacío.
Algo que resulta especialmente curioso, porque el Tesla Cybertruck no está precisamente cumpliendo con las expectativas de autonomía prometidas inicialmente.
Estamos hablando de un uso por carga sobre el papel de 515 kilómetros, según el ciclo norteamericano EPA, aunque las distintas pruebas reales arrojan una autonomía en torno a los 409 kilómetros, hablando de la versión de acceso con dos motores eléctricos y 608 CV de potencia.
Una cifra muy baja, teniendo en cuenta que se había hablado en 2019 de 800 kilómetros por recarga, algo que claramente no se ha conseguido. Tampoco lo hace con la batería extra que se vende como opción, de 50 kWh de capacidad y por 15.000 dólares más.
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Eso, sumado al paquete de baterías principal, de 123 kWh, con un aumento del peso al añadir la batería extra, por lo que el crecimiento de la autonomía no va más allá de los 200 kilómetros, para quedarse en unos 700 kilómetros homologados, que en realidad son algo menos en un uso en circulación real.
De ahí que no se entienda ese exagerado espacio vacío entre las celdas 4680 y la cubierta superior del paquete. Lo que sí parece es que en los próximos meses llegarán algunas mejoras, entre otras cosas relacionadas con una reducción de los tiempos de carga, básicamente logrando una curva de potencia más alta y estable durante el proceso.
Con esta actualización, se podría conseguir en 15 minutos una recarga para diera lugar a unos 250 kilómetros de autonomía.
Es posible que Ford ya sepa todo lo aquí publicado, porque se sabe que compraron un Tesla Cybertruck a precio de oro para desmantelarlo, pero no se había hecho público hasta que Munro ha entrado en escena.
Y se sospecha que BMW también ha adquirido uno de estos modelos, aunque de manera más discreta. Lo que no quita que hayan salido a la luz los rumores de la compra. Y seguro que no son los únicos fabricantes que quieren espiar la tecnología de los coches de Elon Musk.