Aunque los coches eléctricos de Tesla aplastan de manera clara a todos sus contrincantes en el apartado comercial, lo cierto es que si se analiza el mercado en busca de alternativas es fácil encontrar otras opciones que mejoran de manera muy clara lo que proponen sus modelos. Este es el caso de uno de los últimos SUV eléctricos que ha llegado al mercado, ya que no sólo iguala la autonomía del Tesla Model X en este caso, sino que además está mucho mejor diseñado y disfruta de un habitáculo y diseño interior a la altura de su precio (que es casi 40.000 euros inferior), algo que el modelo de Tesla no puede presumir, ya que su habitáculo sigue dejando mucho que desear.
Se trata del Polestar 3. El segundo modelo de la marca nacida a partir de Volvo es un E-SUV de 4,9 metros de longitud que mejora la receta del Model X en todo lo posible: es más 'compacto' que el modelo de Tesla (que mide 5,06 metros), la diferencia de precio puede llegar a ser de hasta 36.000 euros entre las versiones más excluivas de ambos modelos y, aunque todavía no lo hemos podido tocar, a buen seguro habrá superlativas diferencias en la calidad de su habitáculo, que es el talón de Aquiles de Tesla.
A estos aspectos se ha de sumar que, aunque no puede llegar a igualar la potencia del Model X, el Polestar 3 sitúa ambas versiones en un rango de autonomía similar a la de su rival. Disponible para reservar en dos versiones (que hacen uso de la misma batería de 111 kWh de capacidad), la variante de acceso se denomina Long Range Dual Motor y ofrece una potencia de 489 CV, así como una autonomía de 610 kilómetros, mientras que, si se opta por la Performance, la potencia se eleva hasta los 517 CV, descendiendo la autonomía hasta los 560 kilómetros.
Esta última versión, anuncia una cifra de potencia muy llamativa, pero no tan estelar como los 1.020 CV que caracterizan al Model X Plaid. Pero a decir verdad, ¿quién necesita más de 1.000 CV en un coche que va a tener un uso diario y familiar? ¿Son precisos, incluso, los 517 CV que anuncia el Polestar?
Sea como fuere, lo cierto es que el sueco se antoja como una compra mucho más sensata que el americano, aunque sólo podrán valorarlo los bolsillo más acaudalados. Ya que anuncia precios de 92.900 y 99.500 euros para cada una de sus versiones, que son 23.590 y 36.990 euros más asequibles que las versiones de acceso y tope de gama, respectivamente, del Tesla Model X en nuestro país.