Esta semana se ha presentado el macroproyecto europeo EBA 250 (European Battery Alliance) con la participación de varios ministros de la UE o personalidades del mundo de la movilidad eléctrica de la talla de Elon Musk. Este evento está ligado al lanzamiento de dos proyectos IPCEI (Proyectos Importantes de Interés Común Europeo), donde la empresa española Little participará con su programa para la recuperación y reutilización de baterías eléctricas, Little-Energy.
Little se convierte así en una de las empresas de toda España en participar con un proyecto propio en esta gran iniciativa, dotada de 250.000 millones de euros, y en la que colaboran más de 400 compañías y entidades de los diferentes estados miembros de la UE.
El proyecto de Little-Energy ha superado la última criba, en una convocatoria en la que participaba junto a algunas de las principales compañías energéticas españolas.
Little-Energy es la nueva rama de negocio creada por Little Electric Cars para acometer este programa, denominado Second Life Battery Packs. El objetivo de este ambicioso proyecto es recuperar las baterías de los coches eléctricos para crear nuevos battery packs que se reutilizarán como sistemas de almacenamiento de energía (ESS) en viviendas y pymes.
Para llevarlo a cabo, Little recuperará las baterías de los coches eléctricos, principalmente en plantas de desguace, y las analizará celda a celda. Las que estén en malas condiciones, se enviarán a empresas de reciclaje, mientras que las que se encuentren en buen estado, se reutilizarán para montar nuevos battery pack destinados al almacenamiento de electricidad.
“Siempre suelo explicarlo con el mismo ejemplo: cuando tenemos en casa un aparato eléctrico que usa pilas, por ejemplo, un coche teledirigido, y este se estropea, te deshaces del mismo, pero las baterías las extraes y te las quedas para darles otro uso. ¿Por qué no hacer lo mismo con los coches eléctricos?”, subraya Ramón Castro, responsable de Desarrollo del Negocio de Little Energy.
De esta forma, con este proyecto se da respuesta, además, a una de las grandes preocupaciones, a nivel medioambiental, sobre los coches eléctricos, que es la de la contaminación que puede acarrear el posterior almacenamiento de las baterías.
Para acometer este proyecto, Little está en proceso de construir una nave industrial, donde se recogerán las baterías procedentes de los recicladores del automóvil o de otras empresas y se analizarán una a una todas las celdas de cada battery pack.
“Calculamos que cada batería desechada mantiene entre el 60% y el 90% de su capacidad de almacenaje”, explica Castro, razón por la que esta recuperación resulta todavía más interesante.
Producción y mercado
La producción de los nuevos sistemas de almacenamiento de energía (ESS) se destinará a viviendas o pymes con sistemas de autoabastecimiento de energía, mediante placas fotovoltaicas o aprovechamiento eólico.
Dependiendo de las necesidades del cliente final, estos sistemas de almacenamiento se fabricarán con 4, 8, 12 o 16 KW y estarán disponibles para ser instalados tanto en el interior como en el exterior.
Hoja de ruta
El proyecto de Little Energy se puso en marcha en 2019 y este año 2020 entró a formar parte de EBA 250 (European Battery Alliance).
En todo este tiempo, Little ya ha tenido contacto con empresas de desguace, para diseñarles un producto a medida (pack eléctrico), de modo que tengan capacidad de separar las baterías de los coches eléctricos y almacenarlas, con formación específica para el manipulado de las mismas.
Para el próximo año 2021, está previsto presentar el prototipo de sistema de almacenamiento, y comenzar la producción, que se calcula que sea masiva desde 2024.
Proyecto europeo
El macroproyecto europeo EBA 250 (European Battery Alliance) tiene como finalidad la creación de una gran industria europea de baterías, que cubra todos los frentes. Por eso, en la actualidad congrega a más de 400 actores industriales y de la I+D+i, que abarcan desde la minería hasta el reciclaje. Entre ellos, están las más importantes empresas del sector energético de los países miembros, además de múltiples organismos públicos.
El EBA, a su vez, impulsa toda una serie de proyectos propios de empresas, organizados en dos grupos de trabajo dentro del European Cluster Collaboration Platform. Este clúster lanza los proyectos IPCEI (Important Projects for Common European Interest). Por lo tanto habrá dos IPCEI: el “Autumn”, liderado por Alemania; y el “Summer”, liderado por Francia (Renault). Dentro de los proyectos del “Autumn”, existen cuatro ramas, una de ellas destinada a reciclaje y segunda vida, y es ahí donde se enmarca el de Little Energy, que es una de las dos únicas empresas españolas aprobadas.