Si bien la oferta de coches eléctricos en Europa crece por momentos, hay dos categorías que a los fabricantes autóctonos les está siendo complicado cubrir. Nos referimos a los coches eléctricos pequeños, los urbanos del segmento A y a los que están inmediatamente por encima de ellos, los del segmento B. En ambos casos, se trata de mercados que necesitan un amplio volumen de ventas para ser rentables. La ventaja es que el potencial número de clientes al que van dirigidos es muy amplio. Esta es la razón por la que, con motores de combustión, siempre han sido los segmentos más peleados.
Sin embargo, en los últimos tiempos, la oferta de vehículos ha crecido claramente hacia modelos de mayor tamaño y también más caros. Una diferencia que es más notoria con el proceso de electrificación de la industria. Si en el segmento A, por ahora, la oferta es mínima, no ocurre lo mismo en el B. Aquí si hay una competencia importante, la oferta es variada, pero los precios son muy altos. Por eso, los fabricantes se centran en alcanzar el límite de los 25.000 €, antes de ayudas, para este producto. Muchas marcas, entre las que se encuentras Renault, Volkswagen e, incluso, Tesla, ya han anunciado su intención de lanzar modelos a estos precios.
Firefly y Alps, las marcas con las que NO apunta al mercado de masas
El fabricante chino NIO anunció hace unos meses su intención de lanzar en Europa una nueva marca económica, conocida con el nombre en código Firefly, que llegará junto a otra llamada Alps. Según informó Lihong Qin, presidente y cofundador de NIO, esta nueva firma ha sido “diseñada y desarrollada para Europa”, donde estará presente a partir de 2024. "Firefly aportará coches más pequeños, pero con una avanzada tecnología", agregó Qin.
Según indica Autocar, el mandatario lo mencionó en una rueda de prensa telefónica con varios periodistas como competencia principal a Volkswagen, que está trabajando en el desarrollo del pequeño ID.2 para lanzarlo al mercado en 2025 a un precio objetivo de entrada de 25.000 €. También aludió al renacimiento del icónico Renault 5, ahora eléctrico, y a otros competidores chinos como BYD, que recientemente ha puesto a la venta el Dolphin EV.
La marca que viene desde China con una novedad inalcanzable
NIO está desarrollando una nueva generación de su plataforma de intercambio que permitirá la incorporación de baterías más pequeñas, diseñadas para ser compatible con las marcas del grupo orientadas al mercado masivo. Además, este nuevo diseño le permite integrar otros socios que emplearán el mismo sistema, como es el caso de Geely y Changan, según anunció el propio Qin.
Además de estas nuevas estaciones, la plataforma sobre la que se sustentarán estos coches eléctricos incorporará una arquitectura de 800 V, que facilitará acelerar el proceso de recarga cuando no esté cerca una estación de intercambio.
En la actualidad, NIO comercializa vehículos en cinco mercados europeos como Alemania, Países Bajos, Suecia o Dinamarca, donde están disponibles sus modelos bajo la marca prémiun NIO. La compañía tiene la intención de expandir esta oferta al segmento convencional bajo las marcas Firefly y Alps, y España se sitúa como uno de los mercados candidatos para recibirlas.
En ambos casos, ofrecerán la posibilidad de comprar el coche bajo el sistema de intercambio de baterías, lo que debería reducir el precio de compra inicial a cambio del pago de una tarifa de intercambio mensual. Una opción, que no estará disponible para los modelos de la competencia.
