El Mercedes Clase E es uno de los modelos más representativos de la compañía alemana. Después de 75 años de recorrido, la firma acaba de presentar una nueva generación, en la que se incluyen las últimas dotaciones tecnológicas y la electrificación en su sistema de propulsión. La berlina germana se ofrecerá con hasta tres variantes híbridas enchufables.
Estética totalmente nueva
El nuevo Clase E continúa con su tradición y vuelve a presentarse como una berlina clásica de tres volúmenes. En esta ocasión, el capó ha incrementado levemente sus dimensiones, con lo que la cabina se ha retrasado mínimamente para conseguir un nuevo diseño más diferenciador. En el frontal destaca una nueva parrilla de grandes dimensiones que tiene una unión con sus grupos ópticos delanteros; esto recuerda levemente a los frontales que ya poseen los actuales Mercedes EQ.
Dicha parrilla evoluciona según el acabado que se elija, ya que existe la posibilidad de instalar una de las formas más clásicas (con la estrella sobre el capó), o una de carácter más moderno y deportivo, con el emblema de la compañía de grandes dimensiones y en el centro. Esta última variante también incorpora un tramado nuevo en forma de pequeñas estrellas, así como un bajo parachoques con unas aberturas más acusadas.
Sus faros LED Hight Performance también estrenan unas nuevas formas y tecnología, ya que opcionalmente pueden incorporar la particularidad Digital Light, que dispone de la función de proyección. Su firma lumínica es así por un pequeño guiño a los Clase E del pasado donde los faros delanteros estaban divididos.
En el perfil del coche destacan sus manetas enrasadas en la carrocería, algo que ya ha incorporado la compañía en otros modelos de alta gama, como el nuevo Clase S. Sus llantas estrenan diseño y se montarán con un diámetro elevado. Finalmente, la parte trasera incorpora unos grupos ópticos alargados y de gran tamaño, muy cercanos a los que ya posee la berlina de representación, aunque aquí con unas formas más distinguidas. Sendos pilotos están unidos por una moldura central, con un dibujo interior que resalta una firma lumínica que evoca la estrella de Mercedes. Por último, la diferenciación entre un acabado y otro también se refleja en el parachoques trasero. Muy diferentes uno de otro.
El interior más tecnológico y espacioso de su historia
El habitáculo del Mercedes Clase E continúa siendo el gran exponente del confort y la comodidad para sus pasajeros. En términos generales, la nueva generación estrena el diseño de todo el conjunto (asientos, consola o paneles de las puertas). Sin embargo, lo que más llama la atención de este espacio es su nuevo salpicadero, en el que se adopta la pantalla Superscreen bajo el conocido sistema MBUX. Esta difiere en algunos aspectos de la Hyperscreen de la que hace uso el Mercedes EQS, ya que no incorpora la instrumentación en el propio panel, sino que se presenta como una pantalla externa.
Esta Superscreen se acopla a todo el ancho del salpicadero, de un pilar A al otro, lo que crea una imagen más inmersiva. Cuenta con la ya mencionada pantalla de instrumentación, así como la central de info-entretenimiento y otra para el copiloto.
En términos generales, el nuevo Clase E estrena materiales de primera calidad como cuero o maderas de poro abierto. También hace lo propio con los sistemas de asistencia a la conducción, donde la mayoría se incluye de serie. Finalmente, la amplitud interior de la berlina se incrementa en un total de 5 mm de altura para la cabeza en el caso del conductor. Los pasajeros traseros ganan espacio para las piernas y en anchura, casi equiparándose con las cotas del Clase S. El maletero, por su parte, cuenta con hasta 540 litros de capacidad.
Mecánicas híbridas enchufables
El nuevo Mercedes Clase E incorpora un total de tres variantes mecánicas con hibridación enchufable. Adicionalmente otras tres alternativas serán de gasolina o diésel (todas bajo un sistema micro-híbrido). En el caso de las que poseen un mayor protagonismo de la electrificación se encuentran el 300 e, 300 e 4Matic y 400 e 4Matic, aunque todas bajo un esquema prácticamente idéntico.
Bajo el capó de la berlina, se esconde un motor cuatro cilindros de gasolina y 2.0 litros de cubicaje que entrega una potencia de 204 CV en el 300 e y 252 CV en el caso del 400 e. A este se une un sistema eléctrico con 129 CV alimentado por una batería de 25,4 kWh de capacidad. Esto detona en una autonomía eléctrica de hasta 118 kilómetros para el modelo más eficiente (300 e). La potencia total, por su parte, es de 313 CV (550 Nm de par máximo) para las dos versiones iniciales y de 381 CV (650 Nm) para el más alto de gama.
La recarga de la batería se puede ejecutar tras sólo 30 minutos de enchufe utilizando el cargador opcional de hasta 55 kW de potencia. De serie, equipa el de 11 kW que demorará aún más la recarga completa.
Precio y fecha de llegada a España
La nueva generación del Mercedes Clase E llegará a Europa a partir del próximo verano de 2023, por lo que la preventa podría abrirse en apenas unas semanas. Su fabricación se llevará a cabo en Alemania, en la planta que la compañía posee en Sinderlfingen. El precio de partida de esta berlina aún es un completo desconocido, por lo que todavía habrá que esperar unas semanas para que sea desvelado.