Con una idea que no ha sufrido cambios desde 2009, Porsche vuelve a renovar su berlina deportiva para mantenerla al día con cambios aparentemente de poco calado. La realidad, sin embargo, es que este nuevo Porsche Panamera ha cambiado en todos y cada uno de los aspectos para seguir haciendo frente, con sus 5.05 metros de longitud, a la oferta de berlinas de lujo.
Con su presentación, y como es habitual en Porsche, se ha confirmado directamente la serie de precios que tendrá el modelo en cada país, entre los que por supuesto está España. En un principio, la gama del nuevo Panamera estará compuesta por tres versiones: Panamera (básico), que partirá de 125.102 euros; Panamera 4 (con tracción a las cuatro ruedas), que costará 129.836 euros, y la versión híbrida enchuable Turbo E-Hybrid, que tendrá un precio de 198.800 euros.
Es precisamente esta última versión, la Turbo E-Hybrid, la que capta nuestra atención. Es la primera de las cuatro variantes de la serie E-Hybrid que tendrá el modelo. Representará el tope de gama de todas las versiones disponibles del Panamera gracias a una potencia combinada de 680 CV. Esto es posible por un motor V8 turboalimentado y un motor eléctrico de nueva factura de 190 CV.
La batería de la que se alimentará el propulsor eléctrico tiene ahora una capacidad de 25,9 kWh, lo que, con una carga completa, permitirá una autonomía eléctrica de hasta 91 kilómetros, en el ciclo combinado WLTP, o de entre 83 y 93 km, en ciclo urbano, según Porsche (dependerá del equipamiento). En cuanto a sus prestaciones, el Panamera Turbo E-Hybrid alcanzará los 315 kilómetros por hora, mientras que la aceleración desde parado hasta los 100 es capaz de hacerla en 3,2 segundos.
En este nuevo Panamera, Porsche ha conseguido rebajar algo de peso gracias a la nueva manera en la que ha integrado el motor eléctrico en la cadena cinemática. El cambio PDK de ocho relaciones ha sido rediseñado a fondo, lo que ha permitdo a la marca prescindir de una carcasa específica para el motor eléctrico, que queda embebido en la transmisión, consiguiendo aligerar unos 5 kilos el conjunto.
Otro de los aspectos técnicos en los que Porsche hace especial hincapié es en el sistema de suspensión Porsche Active Ride, que está disponible como opción para las versiones E-Hybrid del nuevo Panamera.
Según la marca, es mejor que otros sistemas de suspensión en todos los "parámetros relevantes". La base del sistema son unos amortiguadores activos de nuevo diseño y unos muelles neumáticos monocámara. Los primeros trabajan con dos válvulas y están conectados cada uno a una bomba hidráulica eléctrica que genera un flujo que varía el volumen en el amortiguador, según sea necesario.
Esto, describe Porsche "altera de forma rápida, precisa y selectiva las fuerzas transmitidas entre las ruedas y el bastidor", contrarrestando y compensando en gran medida casi por completo las sacudidas y movimientos causados por las irregularidades de la carretera. También compensa, en aceleraciones fuertes o frenadas repentinas, el cabeceo de la carrocería.
En el habitáculo los cambios son menos evidentes que en el exterior. La estructura del salpicadero y la distribución de los mandos sigue siendo la misma, pero se ha mejorado el funcionamiento del sistema multimedia y también su uso de cara al pasajero delantero gracias a una pantalla opcional de 10,9 pulgadas, en la que se puede manejar el sistema e incluso reproducir vídeos mientras el coche está en movimiento. Para no distraer a quien está al volante, esta pantalla del acompañante no puede verse desde el asiento del conductor.
Ya se pueden efectuar pedidos del nuevo Porsche Panamera a través de la web de Porsche, aunque las entregas no están previstas hasta marzo de 2024.
