El coche eléctrico está llegando a todos los segmentos del mercado, por lo que no debería resultar extraño ver una opción de aspecto retro. El nuevo Carice TC2 llama particularmente la atención por su inconfundible estética, pero lo cierto es que también incluye importantes novedades a nivel de tecnología y componentes eléctricos. Se trata de un automóvil que ha sido creado puramente para el disfrute de paseos sin emitir partículas contaminantes. ¿Cuáles son sus principales características y por qué puede tener sentido su compra para los entusiastas de este sistema de propulsión?
Carice TC2, el coche eléctrico que busca inspiración en épocas pasadas de la automoción
El Carice TC2 destaca por contar con unas medidas muy contenidas, ya que sus dimensiones son 3,500 metros de longitud por 1,58 metros de anchura por 1,22 metros de altura. Además, firma sobre la báscula un peso máximo de tan solo 590 kilogramos, convirtiéndose así en uno de los coches eléctricos más livianos que se pueden encontrar en toda la industria. En cierto sentido, esto ha sido posible gracias a la incorporación de una aleación patentada por el fabricante holandés, la cual ha sido dispuesta por toda la carrocería.
Este coche eléctrico cumple con la homologación de la Unión Europea, por lo que puede ser comercializado en el continente sin limitaciones técnicas. El motor se sitúa acoplado al eje trasero, contando con una potencia máxima de 41 kW. Pese a que no hay cifras oficiales respecto a sus cifras de aceleración, sí se sabes que su velocidad máxima está limitada a 120 km/h con el objetivo de evitar degradaciones excesivas de la batería.
En cuanto a la autonomía de este vehículo, cabe señalar que está disponible en dos tamaños de batería. En el primer caso, se podrán recorrer hasta 200 kilómetros con cada ciclo de carga, mientras que en la versión de mayor capacidad se extenderá esta cifra hasta 100 kilómetros adicionales. Por otro lado, admite varias opciones de carga, pudiéndose alcanzar el 80% de la autonomía en algo más de dos horas y media.
En el interior, el equipamiento destaca por incluir inserciones en acero inoxidable con botoneras de estilo retro. La madera y la tapicería de cuero vegano son los otros dos principales alicientes que llaman la atención del habitáculo.
El TC2 de Carice está disponible a un precio de 44.500 euros, el cual ascenderá a medida que se agreguen algunas de las opciones que hay disponibles en el configurador. Se trata de una propuesta muy interesante para los aficionados a la industria del motor más nostálgicos. Carice, cuya línea de producción arrancó en 2011 al aceptar pedidos muy concretos por parte de un selecto grupo de clientes, da un paso adelante en lo que se refiere a la producción de automóviles con el TC2.