El motor rotativo, también conocido como motor Wankel, es un tipo de propulsor de combustión interna que se caracteriza por utilizar rotores en lugar de pistones y cilindros convencionales para convertir la energía térmica en energía mecánica. Aunque varios fabricantes han utilizado este tipo de motor, Mazda ha sido el que más ha dedicado esfuerzos al desarrollo de esta tecnología, siendo una parte fundamental de su historia. Con la creciente adopción de vehículos eléctricos y la necesidad de reducir las emisiones, la empresa busca una nueva forma de explotar esta tecnología.
En contraste con los motores de pistón convencionales, el motor rotativo de Mazda presenta una estructura única que le permite generar una potencia considerable en relación con su tamaño y peso. Este motor utiliza una carcasa con forma de figura de ocho, albergando en su interior tres rotores triangulares que se desplazan alrededor de un eje central.
Nuevos tiempos, nuevos motores, nueva filosofía
Hace unos días, durante la celebración del Salón del Automóvil de Tokio, el director ejecutivo de Mazda, Masahiro Moro, anunció la creación de un nuevo departamento dedicado al desarrollo de motores rotativos que comenzará sus operaciones en febrero. A lo largo de su historia, el fabricante japonés ha incorporado motores rotativos en varios de sus modelos más deportivos, como el RX-7 y el RX-8. Sin embargo, esta vez es diferente.
La marca, con sede en Hiroshima, espera que este nuevo departamento contribuya a reducir las emisiones de carbono de sus futuros modelos. El director ejecutivo afirmó que este nuevo departamento "logrará avances en los desafíos de la era de la neutralidad de carbono".
Moro aseguró que Mazda se propone superar los límites de la ingeniería mediante la utilización de una "amplia gama de recursos técnicos". Al igual que Toyota, que ha realizado importantes inversiones en motores de combustión impulsados por hidrógeno, Mazda está explorando alternativas ecológicas a los vehículos eléctricos.
¿Es posible una alternativa a los motores eléctricos utilizando motores de combustión?
Moro reconoció que superar los desafíos técnicos no será precisamente fácil, pero destacó que “encontrar soluciones alternativas a la crisis climática siempre ha sido una tarea difícil”. El antiguo motor rotativo de Mazda volvió a entrar en producción en junio de 2023, tras una pequeña pausa de 11 años. No se instaló en un apasionante deportivo ni en un vehículo compacto, pero de altas prestaciones. Su sitio estaba bajo el capó del MX-30 e-Skyactiv R-EV.
Desde 1967, cuando arrancó su producción, Mazda ha fabricado dos millones de motores rotativos. Para el fabricante, el lanzamiento de esta nueva división es, de nuevo, un hito histórico, en un momento en el que todas las marcas centran sus esfuerzos en el desarrollo de sus vehículos eléctricos.
Al igual que Toyota, Mazda ha sentido sobre sus espaldas las críticas que le acusan de encontrarse rezagado en el lanzamiento de modelos 100% eléctricos. Pero, al igual que sus compatriotas, Moro asegura que esta estrategia es totalmente intencionada. Describe a su compañía como una “seguidora intencional” (intentional follower) en el sector de los vehículos eléctricos. Moro añadió que “el interés en los vehículos eléctricos estaba disminuyendo, por lo que su empresa está explorando soluciones alternativas a la crisis de movilidad”.
Es posible que la nueva división desarrolle motores propulsados por hidrógeno o un sistema de rango extendido similar al del MX-30 e-Skyactiv REV. Los detalles específicos sobre sus propósitos todavía no se han revelado. La empresa está explorando opciones que combinan la herencia del motor rotativo con tecnologías más modernas. Mirar hacia el pasado para abordar desafíos futuros es la estrategia que Mazda está considerando. En este sentido, los vehículos electrificados con motor rotativo podrían representar una solución innovadora y eficiente para las cambiantes necesidades de la industria.