Tesla tiene vía libre para aplicar los ‘descuentos’ derivados del crédito fiscal federal disponible en Estados Unidos y que permiten que el precio final de un vehículo eléctricos sea lo suficientemente bajo como para que los potenciales clientes se decidan a optar por uno de estos coches alternativos a los de gasolina y diésel.
El importe máximo que se puede aplicar es de 7.500 dólares, un incentivo similar al que se ofrece en España con el Plan Moves III, también con entrega de un automóvil antiguo. Y es esa ayuda la que permite que en Estados Unidos se pueda optar a la compra de un Tesla Model Y por un precio de 36.490 dólares, que al cambio de divisa son 33.547 euros. Los créditos fiscales, además, cuentan con la ventaja de poder utilizarse para vehículos nuevos comprados entre 2022 y 2023, pero también para usados y para vehículos comerciales desde 2023.
Con el precio tan rompedor que se consigue en este caso, prácticamente a precio de Tesla Model 3 en España tras aplicar el Moves, Tesla arrastrará a más conductores a su terreno, fruto también, por supuesto, de su guerra y bajada constante de precios que lo llevaron el año pasado a ser el coche eléctrico más vendido en el mundo y en España. Además, ha batido por goleada al resto de modelos en el ranking absoluto de matriculaciones en Europa.
Con esta nueva estrategia, que no es otra que adelantar el crédito fiscal del estado, se colocan en una posición que mejora todavía más su posición respecto al resto de fabricantes, también hablando de vehículos de combustión. Si ya a mediados de 2023 hablábamos de un precio de acceso al Tesla Model Y de 46.990 dólares, por debajo del precio medio que se pagaba por un coche nuevo en Norteamérica, sus recurrentes descuentos y estrategias en los últimos meses van a permitir que el modelo de Elon Musk siga pegando fuerte.
Tesla, tal y como ha comunicado oficialmente, adelantará el crédito correspondiente para que el particular no tenga que pagar el importe íntegro y esperar a que el estado se lo devuelva cuando se cumplan las obligaciones tributarias. Será el propio fabricante el que recupere el importe de la ayuda por parte del gobierno una vez que se haya completado el proceso correspondiente y se compruebe que todo los aportado en el formulario de este incentivo es correcto. Supone una interesante propuesta, frente a tener que esperar meses a recuperar el presupuesto adelantado, algo que con el Plan Moves III lo hemos visto retrasado en hasta dos años.
En todo caso, el comprador será el que se asegure de cumplir los requisitos y el único responsable de que todo lo que aporte sea fidedigno. De lo contrario, el estado pedirá el reembolso de lo que no corresponda. En la letra pequeña también se exigen una serie de ingresos brutos máximos por parte de la persona que adquiere el automóvil y se establece un precio por vehículo que no exceda 80.000 dólares, 77.550 euros al cambio de divisa, frente a los 45.000 euros, antes de impuestos, que puede como mucho costar en España para optar al incentivo.
Esto abre la puerta allí, y en el caso de Tesla, a tener acceso a estos créditos fiscales para adquirir un Model X. Además, en el renting también se puede aplicar, en este caso a las cuotas mensuales. El que no se puede acoger, de momento, a la modalidad normal de compra de un particular con ‘créditos’ es el nuevo Tesla Model 3, aunque sí que permitiría hacerlo mediante el citado renting. Por tanto, su coste inicial se quedaría en 38.990 dólares, por encima del precio actual de acceso de su hermano mayor Model Y, tras aplicarse la opción más alta de créditos fiscales federales.
En España sí que hay marcas que adelantan el Plan Moves III pero obligan al cliente a firmar financiaciones y condiciones del fabricante, que en realidad es algo que hay que hacer también para acogerse a los mejores descuentos y campañas comerciales.
MG, por ejemplo, anticipa el total del Moves, mientras que Fiat y Jeep hacen lo propio con algunos de sus modelos. Mazda es otra de las marcas que se suma a dar esta facilidad a los clientes y, Peugeot y Citroën, por su parte, lo hacen a través de su programa Electric Renting, pero no por compra directa. La maniobra en todo caso consiste en que sea el cliente el que devuelva al concesionario el descuento aplicado en su día una vez que reciba el incentivo por parte del estado, algo que se retrasa habitualmente más de lo que debería.
También se aplica en nuestro país la deducción del 15% y hasta 3.000 euros en la Renta, para los particulares que hayan adquirido o adquieran un vehículo eléctrico nuevo entre julio de 2023 y diciembre de 2024.