Con el encarecimiento del coste de la vida en, prácticamente, todos los frentes, ahora más que nunca antes de valorar la compra de un coche uno de los aspectos más primordiales del modelo a valorar es que este tenga un bajo consumo para que su uso tenga un gasto lo más reducido posible. En este sentido, un coche híbrido puede llegar a reducir drásticamente el gasto en gasolina con respecto a un coche térmico convencional, especialmente el modelo que nos ocupa hoy.
Y es que, tras haberlo probado durante casi 2.000 kilómetros, podemos decir que se trata de uno de los coches con la relación más agresiva entre tamaño, espacio y consumos. Se trata del Renault Austral, un SUV con una mecánica híbrida de 199 CV que en ciudad llegará a arrojar consumos reales por debajo de los 5 litros, mientras que en carretera abierta a 120 kilómetros por hora ofrecerá la eficiencia propia de un motor diésel.
Por medidas, el Renault Austral se considera un C-SUV. Mide 4,51 metros de largo, por lo que compite con duros rivales como el Kia Sportage, el Hyundai Tucson o el Toyota Corolla Cross. Su maletero ofrece una capacidad de 430 litros, muy reducido en comparación con los dos primeros rivales mencionados, pero suficientes para el uso de una familia de cuatro miembros.
Cuando la marca dio comienzo a la comercialización del Austral, lo hizo con tan sólo un par de versiones que hacían que en su especificación de motor híbrido, el precio de partida fuera de casi 38.000 euros. Ahora, sin embargo, Renault ha puesto a disposición del público español la versión más sencilla del modelo junto a la mecánica E-Tech, reduciendo la tarifa de acceso a este motor en casi 3.000 euros.
El Renault Austral Evolution E-Tech, pues, tiene un precio que antes de añadir equipamiento opcional se sitúa en los 35.815 euros. Es cierto que se trata de la versión de equipamiento más ecueto, pero lo cierto es que cuenta con lo más esencial que se puede esperar tener en un coche híbrido de estas características, como faros LED, sistema de información y entretenimiento con el puntero sistema operativo firmado por Google, sistema de ayuda al aparcamientos con sensores delanteros, traseros y laterales y cámara trasera y un largo etcétera.
A nivel técnico estamos ante un SUV que articula su mecánica en torno a un bloque de tres cilindros de gasolina de 1,5 litros que disfruta de turboalimentación. Junto a este propulsor hay dos motores eléctricos más. El principal está embebido en la transmisión y rinde 68 CV, y tiene como objetivo propulsar las ruedas delanteras. El segundo actúa a modo de embrague y sincronizador, pues no existen estos elementos en esta mecánica y rinde 34 CV.
En total la potencia combinada es de 199 CV, lo que le otorga la posiblidad de hacer el 0 a 100 en 8,4 segundos y homologar un consumo de tan sólo 4,5 litros a los 100, el mejor de su categoría.
La lista de equipamiento opcional es reducida. Quienes quieran equipar su Austral Evolution al máximo sólo podrán sumar llantas de 18 pulgadas en acabado bitono con neumático de todo tiempo (350 euros), el Pack Safety (380 euros), rueda de emergencia bajo el piso del maletero (170 euros), asientos delanteros calefactables (300 euros), asiento delantero del conductor eléctrico con masaje (490 euros).
El precio máximo del modelo, con todo el equipamiento posible será de 38.815 euros, contando con la pintura negra, que está incluida. Aparte, se puede configurar en colores Blanco Glaciar (260 euros), Gris Pizarra (600 euros) y Azul RAyo (800 euros).