Europa prohibirá a partir de 2035 la venta y matriculación de coches nuevos con motor de combustión que emitan gases nocivos a la atmósfera. Esto es algo que se hizo público a mediados del pasado mes de mayo, cuando la Comisión de Medio Ambiente de la Unión Europea aprobó dicha medida. Posteriormente, a principios del presente mes de junio, el Parlamento Europeo ratificó esta medida y a día de hoy se encuentran negociando las medidas concisas de cara a una aprobación definitiva por parte de los diferentes estados después del verano.
En este particular "tira y afloja" entre ciertos países miembros y el gobierno europeo, se están aclarando las condiciones en las que se adaptará el definitivo suspenso de las ventas de mecánicas contaminantes en la región. A día de hoy, cinco países de la Unión Europea se declaran reticentes a esta medida, pidiendo un receso de cinco años en la medida para adoptarla (en lugar de en el 2035 que se efectúe en el 2040), ya que alegan que la salud financiera de sus ciudadanos no es la misma que en la de otros países de la UE. Estos cinco países son Italia, Portugal, Eslovaquia, Bulgaria y Rumanía. España, por su parte, siempre ha mostrado su apoyo a la medida de supresión de estos vehículos en el periodo estipulado.
Alemania, por su parte, mostró su apoyo a la prohibición de la comercialización de coches térmicos en Europa, siempre y cuando estos emitan gases tóxicos a la atmósfera, algo que dejaba la puerta abierta a la llegada de las mecánicas que funcionen con combustibles sintéticos, los cuales son neutros en emisiones de carbono.
En las últimas horas, ya que la sesión se prolongó hasta altas horas de la pasada madrugada, los países miembros de la UE apoyaron la prohibición de venta de coches y furgonetas que emitan CO2 a partir de 2035, por lo que dejaron abierta la puerta a la posibilidad de la llegada de los combustibles sintéticos. De hecho, desde la Unión Europea han afirmado que esta opción será estudiada y se explorará la posibilidad de que los vehículos vendidos en Europa puedan adoptar esta solución más allá del año 2035.
La Ministra para la Transición Energética de Francia, Agnès Pannier-Runacher, subrayó que esta legislación sobre la eliminación de emisiones en vehículos viene determinada por la "posibilidad de matricular vehículos de combustión si y sólo si sus emisiones son nulas". El vicepresidente de la Comisión Europea para el Pacto Verde, Frans Timmermans, añadió a esta exposición de la ministra francesa que los combustibles sintéticos de cero emisiones "hasta ahora no se presentan muy realistas porque parecen prohibitivos en términos de costes para los fabricantes", aunque si estos consiguen que sean comercialmente viables, la Comisión "tendrá la mente abierta".
Las nuevas medidas acordadas hace escasas horas también se han metido de lleno con los vehículos de mecánica híbrida enchufable. Las estimaciones del Consejo de la Unión Europea fijó unos porcentajes concretos sobre reducción de emisiones en los próximos años donde se estipuló una disminución del 15 por ciento en 2025, seguido de un 55 por ciento en 2030 y, por último, de una nulidad completa en 2035. En estos términos también se enmarcan los híbridos enchufables al disponer de un bloque térmico que emite CO2.
Sobre estos, la Comisión Europea ha afirmado que en el año 2026 examinará y revisará los progresos realizados sobre estos vehículos y si se están cumpliendo los objetivos fijados por el gobierno europeo. Frans Timmermans añadió que "muchos fabricantes mantienen que los híbridos enchufables podrán llegar a los niveles estipulados para tal fecha, aunque, por ahora, no lo hacen". A cuenta de esto, la Unión Europea ya fijó hace unas semanas que se modificará de forma considerable la manera de calcular las emisiones nocivas producidas por los híbridos enchufables a causa de que muchos de sus propietarios acaban circulando con estos vehículos sin utilizar su parte eléctrica, lo que se traduce directamente en coches térmicos al uso.