El Ford Fiesta ha dejado una huella indeleble en la historia del automóvil, siendo uno de los utilitarios más emblemáticos durante casi cinco décadas de producción. Con más de 22 millones de unidades vendidas, este compacto se consagró como un auténtico éxito a nivel global. Sin embargo, en 2023, Ford anunció el fin de su producción, una decisión que sorprendió a muchos y dejó en el aire la posibilidad de su regreso.
A pesar de este anuncio, varias han sido las ocasiones en las que se ha rumoreado que Ford planeaba su reaparición con un formato totalmente nuevo y electrificado. Jim Farley, CEO de Ford, insinuó tiempo atrás el desarrollo de una nueva línea de vehículos eléctricos "pequeños y asequibles" para competir directamente con las marcas chinas que están ganando terreno en el sector.
Criticas del exdirector de Ford en Alemania a la UE y al sector
Gunnar Herrmann, exdirector de Ford en Alemania, ha señalado el inmovilismo del sector automovilístico en Europa como uno de los principales desafíos para los fabricantes actuales. Según Herrmann, las estrictas regulaciones de electrificación y reducción de emisiones impuestas por la Unión Europea han sido un factor determinante en la decisión de Ford de poner fin a la producción del icónico Ford Fiesta en su planta de Colonia. Esta fábrica ha sido transformada, tras una inversión de más de 2.000 millones de euros, para centrarse en la producción de los nuevos modelos eléctricos como el Ford Explorer y el Capri.
En una entrevista con el diario alemán Kölner Stadt-Anzeiger, Herrmann destacó que aunque algunos abogaban por extender la vida del Fiesta, esto no habría sido una decisión sensata en el contexto actual. La planta de Colonia tiene una capacidad instalada para producir 250.000 vehículos al año, lo que asegura que puede cubrir la demanda europea de los nuevos modelos eléctricos de Ford.
Respecto a las normas ambientales que entrarán en vigor el próximo año, que limitan las emisiones promedio de las flotas a 93,6 gramos de CO₂ por kilómetro, Herrmann advirtió que incluso los fabricantes más pequeños podrían enfrentarse a multas significativas. Volkswagen, por ejemplo, podría enfrentar sanciones superiores a los 250 millones de euros si no cumple con los objetivos. Además, Herrmann subrayó que, desde su perspectiva, la movilidad eléctrica no será financieramente rentable hasta al menos 2027. Sin embargo, lograr esta rentabilidad no dependerá únicamente del lanzamiento de nuevos modelos, sino de mejorar las tecnologías y optimizar las estructuras de producción.
Herrmann insistió en que la industria automotriz alemana no está en crisis, sino que atraviesa un proceso de transformación. Este cambio, que requiere tiempo y paciencia, implica una reconfiguración de recursos, tecnologías y capacidades. No obstante, el empresario advirtió que aún no se están haciendo suficientes esfuerzos para facilitar esta transición. Una de las principales preocupaciones es la actualización de las certificaciones de los trabajadores del sector, que deben adaptarse a los nuevos procesos que requiere la producción de vehículos eléctricos.
Los coches eléctricos chinos
En cuanto a la creciente competencia china en el mercado de vehículos eléctricos, Herrmann coincidió con el canciller alemán, Olaf Scholz, en que no se debe temer la llegada de las marcas chinas. En lugar de verlo como una amenaza, considera que esta competencia debería servir como un estímulo para la industria europea.
Scholz también se pronunció en contra de los aranceles sobre la importación de vehículos eléctricos chinos, argumentando que estas medidas podrían perjudicar a la propia industria europea. Esta postura ha sido respaldada por el consejero delegado de Mercedes-Benz, Ola Källenius, quien aboga por posponer la implementación de estos aranceles para facilitar la transición de Europa hacia la electrificación.
El potencial renacimiento del Ford Fiesta, bajo una nueva identidad eléctrica, no solo respondería a las demandas actuales del mercado, sino que también colocaría a Ford en una posición competitiva dentro del segmento de vehículos eléctricos compactos, contribuyendo a su ambición de liderar la movilidad sostenible en el futuro.