Si te decimos que la Gigafactoría de Shanghái se va a convertir en el mayor centro de Tesla no te contamos nada nuevo, de hecho ya lo es. La planta china presenta un ritmo de producción completamente demencial, incluso tras el parón por la pandemia de COVID y las múltiples dificultades surgidas para la posterior puesta en marcha. Esa capacidad ha animado a los de Austin a acelerar su ampliación, barajando cifras completamente increíbles.
Antes de avanzar hay que tomar impulso. Tesla ya está planificando la ampliación y para ello tendrá que cerrar parte de las instalaciones para poder acometer las reformas necesarias. Cuando la gran factoría fue inaugurada hace unos años ya se construyó pensando en posibles ampliaciones. A pesar de ello durante unas semanas parte de la fábrica estará cerrada, lo que supondrá bajar un poco el ritmo de producción, pero solo durante unas pocas semanas.
Diversas fuentes han comentado que las obras de actualización darán comienzo este mismo mes de julio y que durarán un plazo aproximado de entre 4 y 6 semanas. Eso quiere decir que en agosto la Gigafactoría de Shanghái estará otra vez operativa al 100% y con una capacidad de producción aumentada. Actualmente, en una semana normal, se producen aproximadamente 16.500 coches, entre Tesla Model 3 y Tesla Model Y. La nueva cifra supera con creces esa cota.
Se espera que tras esta pequeña remodelación, la Gigafactoría de Shanghái sea capaz de elevar la producción hasta las 21.000 unidades semanales. Si multiplicamos esa impresionante cifra por las 52 semanas que tiene un año natural, estamos hablando de una producción anual superior al millón de unidades. Es decir, la planta china sería capaz de fabricar por sí misma más coches de los que Tesla vendió el año pasado. La mayor parte de la producción corresponderá al Model Y, representando más del 65% de las unidades totales.
Elon Musk y parte de la junta directiva de Tesla llevan tiempo comentando la posibilidad de ampliación. Sin embargo, los problemas causados por la pandemia de COVID-19 en China han retrasado el proyecto. Si finalmente Shanghái es capaz de producir las cifras que se barajan, se convertirá en la planta de coches más grande del mundo, superando a instalaciones de gigantes como BMW, Toyota, Ford o Volkswagen.
Esta no es la única reforma que Tesla está planificando, pues todas las miradas están puestas en la Gigafactoría de Berlín. Hace apenas unos meses que está operativa, pero los de Austin ya plantean una ampliación de esta para así mejorar el volumen de producción. La semana pasada los trabajadores de la planta alemana celebraban la producción de 1.000 vehículos a la semana. Una cifra muy inferior a la de la planta china, pero aún así muy notable teniendo en cuenta la juventud de las instalaciones.