La empresa H2X Australia fue creada hace cinco años por un grupo de ejecutivos australianos relacionados con el sector de la automoción y la energía con el objetivo de hacer realidad un plan para ensamblar vehículos eléctricos híbridos, impulsados por hidrógeno y baterías, a partir de una misma plataforma básica. La eficiencia energética del tren motriz se extiende a la de los materiales que forman parte del diseño, tanto en el exterior como en el interior, creando desde cero vehículos eficientes, rentables y sostenibles.
El sistema híbrido que plantea H2X se basa en establecer un equilibrio entre la energía que pueda proporcionar al vehículo el hidrógeno y la batería electroquímica. El sistema energético está compuesto por lo tanto por una celda de combustible, la batería y un conjunto de supercondensadores, que se incluirán en la cadena cinemática según las necesidades de cada aplicación.
Plataforma básica de H2X Australia.
La empresa fue creada hace cinco años. En la actualidad, el equipo H2X está trabajando en varios proyectos relacionados con el hidrógeno en sectores como el de los ferrocarriles, la industria marina y los sistemas de almacenamiento de energía estacionaria. Además está desarrollando una gama de vehículos eléctricos pesados relacionados con la industria comercial y los sectores mineros, que tienen previsto su lanzamiento en breve. Estos trabajos sirven de apoyo para el desarrollo de la tecnología.
Todos los vehículos que han sido planificados hasta la fecha se construirán sobre un chasis fabricado en Europa o América, que se completará con el resto de los componentes que se ensamblarán localmente. Incluye la inminente gama de vehículos industriales pesados y otra de pasajeros.
Tractor industrial de H2X Australia.
La futura gama de vehículos de pasajeros, recogerá la experiencia de los primeros vehículos industriales. Brendan Norman, CEO de H2X, asegura que están trabajando en su viabilidad comercial, que depende en gran medida de la adopción de la tecnología del hidrógeno, muy influenciada por la percepción y aceptación del público general. H2X está evaluando el momento adecuado para que su introducción sea aceptada por el mercado generalista.
La empresa Australia anuncia que mostrará a los medios de comunicación el primero de sus prototipos reales en los próximos meses. Según su plan, la producción de bajo volumen arrancará a partir de 2022. Según Norman, su volumen de producción debería permitirles liderar este mercado en 2025. Los primeros vehículos que se generarán a partir de la plataforma única serán un taxi, una furgoneta de reparto o posiblemente un SUV que se destinarán a empresas que dispongan de capacidad de reabastecimiento de hidrógeno.
Furgoneta híbrida de hidrógeno y baterías e H2X Australia.
H2X tiene cerrados ya varios acuerdos con empresas australianas y extranjeras, para arrancar la producción de la primera fase de su plan de producción. "Estos proyectos también ayudarán a crear una industria del hidrógeno australiana, que esperamos que ayude a educar y promover el crecimiento de esta tecnología e influya en el establecimiento de la infraestructura de abastecimiento necesaria".
H2X tiene su sede en la región de Nueva Gales del Sur, en el distrito de Illawarra. Se trata de una ubicación estratégica. Por un lado se sitúa cerca del Port Kembla, un importante nodo de transportes desde el que importar componentes y exportar sus vehículos. Además, la zona forma parte de una creciente red de proyectos de hidrógeno verde que se extiende por toda la Zona de Energía Renovable de Nueva Gales del Sur, más allá de la costa este del país.
Interior sostenible de los vehículos de H2X Australia.