Fabricantes como Ferrari y Porsche lanzan normalmente un nuevo hiperdeportivo cada diez u once años, aproximadamente. En la última hornada, con el LaFerrari y el 918 Spyder, se unió a la fiesta McLaren con el P1. Se lanzaron al mercado en 2013, así que es normal que ya se esté hablando de sus respectivos sucesores. En el caso de McLaren, el sucesor del exitoso P1 será totalmente eléctrico, pero antes se necesitará una mejora importante en la tecnología de baterías.
Los vehículos eléctricos son uno de los tres pilares sobre los cuales desarrollará McLaren su gama para los próximos años, junto con los motores de combustión interna y los híbridos. La presencia de estos irá creciendo paulatinamente hasta alcanzar el 90% de las ventas de McLaren a finales de esta década. Sin embargo, a día de hoy, en la compañía británica "no están seguros" de los superdeportivos totalmente eléctricos.
La razón principal tiene que ver con el estado actual de la técnica de las baterías y el enorme peso que tienen, algo de vital importancia cuando hablamos de coches realmente deportivos. Según Michael Leiters, el actual jefe de McLaren, en su marca no quieren "hacer un coche de 2.000 kg y 2.000 CV, cualquiera puede hacerlo". Eso, dice Leiters, "no está en el ADN de McLaren".
En su lugar, prefieren esperar que la tecnología evolucione hasta poder tener un eléctrico comparable al 750S en cuanto a peso. Es decir, en el entorno de los 1.400-1.500 kilos, algo difícil de conseguir (por no decir imposible) si se coloca una batería lo suficientemente grande para conseguir buenas prestaciones.
Además de un peso contenido, hay otro objetivo: el futuro modelo eléctrico de McLaren "tiene que superar" a los de motor de combustión. Y con superar no se refieren solamente a potencia pura o prestaciones en línea recta, sino a la buena dinámica de conducción y agilidad del vehículo. La marca de Woking confía en que su primer eléctrico será emocionante de conducir y podrá encajar en el ADN de la marca.
¿Cuándo llegará al mercado y qué posición ocupará en la gama? El sucesor eléctrico del McLaren P1 se lanzará a finales de esta década, si bien no han especificado de manera más concreta. Además del desarrollo de la tecnología, hay dos factores más para no lanzar antes un modelo así: por una parte, en McLaren podrán salvar el partido mediante el uso de combustibles sintéticos. Por otra, los clientes de la firma no demandan coches eléctricos. No obstante, Leiters reconoce que "deben tener cuidado", pues "los tiempos están cambiando" y han de prepararse para ello. "El éxito del 750S demuestra que a nuestros clientes les encantan los coches con motor de combustión, pero tal vez haya otros clientes interesados en otras cosas".
Será, literalmente, el sucesor del P1. Es decir, un hiperdeportivo eléctrico situado en lo más alto de la familia de modelos de McLaren. "En general, creo que la mejor manera de introducir una nueva tecnología es de arriba hacia abajo", según ha dicho Leiters a Autocar. Esas afirmaciones llevan a pensar, por un lado, que será un coche con la tecnología más avanzada del momento. Y, por otro, a que dicha tecnología se acabará trasladando a modelos más convencionales.