Los coches eléctricos no son iguales que los de combustión. Cuando los primeros modelos llegaron al mercado, las dudas se amontonaban entre los que se interesaban por ellos, que no sabían, ni siquiera, si se podían lavar o cargar mientras llovía. Argumentos que también utilizaban sus detractores para atacar la nueva movilidad que llegaba. Hoy ya sabemos que un coche eléctrico se puede mojar tanto como uno de combustión. Sin embargo, hay algo que los diferencia y Tesla ha pensado en ello.
Tesla solo fabrica coches eléctricos y eso se nota en el especial cuidado que pone en todos los detalles. Llevar a lavar un coche tan sofisticado tecnológicamente no está exento de riesgos. Por eso, el fabricante americano ha incluido en su más que elaborado software un ‘Modo de Lavado’ (Car Wash Mode) que asegura que nada le va a ocurrir al coche durante todo el proceso.
Se trata de una opción incluida entre sus menús que, probablemente, no conocen muchos de sus propietarios. Una función que no es nueva, sino que lleva tiempo implementada, que ha pasado desapercibida y que puede llevar a consecuencias no deseadas si no se activa. En efecto, no activar el Modo de Lavado cuando arranca el proceso en un túnel puede dañar el vehículo. Y lo que es más importante, dichos daños no están cubiertos por la garantía.
Así, por ejemplo, si este modo no está seleccionado, el vehículo puede activar los limpiaparabrisas al detectar lo que él cree que son gotas de lluvia. Como consecuencia, el agua del lavado puede llegar a dañar los brazos de este sistema, que no están preparados a resistir una lluvia a esa presión. Este modo desactiva el barrido automático de los limpiaparabrisas, aunque esto no es lo único que hace. Así queda la configuración del coche cuando se selecciona:
- Mantiene la velocidad del vehículo por debajo de los 16 km/h (10 mph) para que el coche transite muy despacio por el interior del túnel de lavado.
- Cierra todas las ventanas.
- Bloquea el puerto de carga para evitar que se abra y el agua pueda dañar la instalación eléctrica y la electrónica.
- Se desactiva el bloqueo de puertas automático por inicio de marcha.
- Se desactiva el accionamiento automático de los limpiaparabrisas.
- Se desactivan las señales de aviso del sistema de aparcamiento automático.
- Se desactiva la apertura eléctrica y automática de las puertas (solo en el Model X).
- Para evitar molestias innecesarias, se desactiva el modo centinela, que vigila el entorno del coche cuando se estaciona.
- Se configura el aire del climatizador en modo recirculación.
- El maletero y el frunk (maletero delantero) se cierran para evitar que la presión del agua pueda levantarlos.
En este vídeo se muestra el proceso completo de lavado de un Tesla Model 3:
Con las famosas actualizaciones OTA, que Tesla ha introducido en la industria automovilística, se ha ido mejorando el Modo Lavado y continuará haciéndolo en futuras iteraciones a medida que la tecnología del automóvil evolucione y se agreguen nuevas características.
Para habilitar este modo, hay que seleccionar Controles > Servicio > Modo de lavado. El manual advierte de que el vehículo debe estar parado y sin conectar a un puesto de carga (lógicamente). También se aconseja habilitar el ‘giro libre’ del vehículo (pisar pedal del freno y habilitar esta opción) que mantiene la posición del cambio en Neutro y que impide que se active el freno de mano, de manera que el coche rueda empujado por el sistema de arrastre del túnel.
Como decíamos, el propio manual hace una indicación muy importante: “Si no se pone el Model S, 3, X, Y en el Modo de Lavado, se pueden producir daños (por ejemplo, en el puerto de carga o en los limpiaparabrisas). Estos daños no están cubiertos por la garantía”. Auqnue esta función solamente está presente hoy en día en los coches eléctricos de Tesla pronto formaráparte del equipamiento del nuevo Kia EV9, que todavía no está a la venta en España.