La española Hispano Suiza ha hecho debutar el Carmen, un coche eléctrico de superlujo con enorme potencia y gran autonomía, en el Salón de Ginebra que ha abierto sus puertas esta semana. La compañía, fundada en 1904 por dos españoles y un suizo, construyó además de coches motores de aeroplano hasta 1946. Tras su desaparición, Hispano Suiza tuvo otro intento de revivir con la presentación de un prototipo en el Salón de Ginebra del año 2002, y ahora está de vuelta con un superdeportivo de lujo llamado Carmen que pretende llevar al mercado con una tirada de producción extremadamente limitada.
El Carmen está construido sobre un monocasco de fibra de carbono, que según la compañía proporcionará la base para el "lujo excepcional, comodidad, innovación y atención al detalle" que ofrecerá este automóvil. El diseño del tren motriz eléctrico es un encargo personalizado que ha supervisado por QEV Technologies, el socio de producción de Hispano Suiza que aportará su experiencia en ingeniería con otras marcas de supercoches y también en Fórmula E.
Con 1.690 kilogramos de peso y dos motores eléctricos montados sobre el eje trasero, el Hispano Suiza Carmen puede desarrollar 1.019 CV de potencia para acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos. Su velocidad máxima, por cuestiones de seguridad, está limitada a 250 km/h. Sus baterías, con 80 kWh de capacidad, ofrecen una autonomía superior a 400 kilómetros, aunque los planes del fabricante incluyen un paquete de 105 kWh que podría ofrecer un incremento considerable en el alcance a partir de 2020. Esto será posible mediante un aumento en la densidad energética de las celdas, que pasará de 230 Wh/kg a 300 Wh/kg. Gracias al sistema de carga rápida compatible con CCS, el Carmen recupera el nivel de batería del 30 al 80 por ciento en menos de media hora. Además, Hispano Suiza ha comunicado que también ofrecerá compatibilidad con el estándar japonés CHAdeMo y el GB/T chino.
Como no podía ser de otra forma, el precio del Hispano Suiza Carmen es más que prohibitivo: los 1,5 millones de euros que costarán cada una de las 19 unidades que se fabricarán lo convertirán en un coche para coleccionistas. Tanto es así que la marca ya ha decidido que incluirá una cláusula en los contratos de compra que evite la reventa del vehículo durante los primeros tres años. Cada ejemplar de este sorprendente coche eléctrico se fabrica completamente a mano en la ciudad de Barcelona y requiere de entre 8 meses y un año para completarse. Hispano Suiza, quien pretende fabricar entre 5 y 7 coches al año, espera terminar la producción de toda la serie hacia finales de 2021. Mientras tanto, podremos ver las primeras pruebas con el Carmen en carretera abierta a mediados del presente año.