Es posible que una de las mayores incomodidades que presenta un coche eléctrico a día de hoy sea la necesidad de enchufarlo por cable a un punto de carga. No obstante, este proceso se ha aligerado bastante en los últimos años gracias al uso de aplicaciones móviles o a la programación de la recarga por horas. Sin embargo, esto aún queda lejos de la comodidad que supondrá la tecnología inalámbrica, algo que ya se encuentra investigando Hyundai y que podría incorporar en sus próximos modelos eléctricos.
El medio CarBuzz ha descubierto una patente registrada por la firma coreana en la Oficina de Propiedad Intelectual de Corea (KIPO) en la que queda claro el camino que espera tomar Hyundai con respecto a las recargas de sus eléctricos. Desde la marca creen que es más que relevante dedicar inversión y trabajo al desarrollo de esta tecnología, puesto que supondrá una facilidad y una comodidad añadida al hecho de poder recargar el coche eléctrico en casa o en cualquier otro estacionamiento.
En los bocetos registrados por la compañía, se aprecia el uso de un alambre plano para los devanados de la bobina. A día de hoy, la mayoría de los equipos de este tipo instalan un tipo de cable muy fino llamado Litz, acertado para accesorios de baja potencia, como recarga de teléfonos móviles, pero insuficiente para llevar a cabo la alimentación del sistema de un coche eléctrico. El mencionado alambre plano se sitúa alrededor de un núcleo cuadrado de ferrita.
Como método de eficiencia energética, la marca ha optado por enrollar el cable plano en ángulos prácticamente rectos. Esto ayuda a mejorar la fuerza del campo magnético generado y reduce las pérdidas de flujo de carga.
Los apartados en los que más hincapié ha puesto Hyundai son en el mantenimiento de los costes de producción, en la mejora en la eficiencia de transferencia energética y en la generación de un potente campo magnético. Todo ello deriva en que el diseño cuadrado de su núcleo será mucho más sencillo para dirigir la emisión energética hacia el vehículo receptor. Este concepto es, entre todo lo que incluye la propia patente, el más importante, debido a que permitirá una potencia de recarga elevada y una optimización de la energía emitida, para que no se pierda demasiado por el camino.
La mayor distancia entre las bobinas electromagnéticas supone que un vehículo de más altura libre al suelo, como un SUV, podrá utilizarlo sin tener que existir contacto directo entre ambas partes. Todas estas soluciones suponen una mejora notable con respecto a los conceptos que actualmente se manejan. En estos casos, una mínima desalineación entre ambas bobinas supone la pérdida de energía o incluso la desconexión de la carga.
Por el momento, no se conoce qué modelo de Hyundai será el primero en incorporar esta tecnología de recarga inalámbrica próximamente. Lo que sí se sabe es que el usuario o interesado en ella deberá contar con una plataforma instalada en el suelo de su aparcamiento. La propia instalación irá conectada a la red eléctrica del entorno e incorporará una aplicación móvil a través de la que se puedan modificar parámetros, potencia de carga o programar los tiempos de uso.
