El Hyundai Tucson se ha convertido en uno de los modelos más exitosos del sector. Su diseño tan característico ha jugado un papel fundamental en esta consecución, pero también su practicidad interior y sus diferentes apartados enfocados en el uso cotidiano y, sobre todo, pensados para durar. Sin embargo, este SUV llegó al mercado hace ya un tiempo, lo que ha supuesto que algunos espacios, como el habitáculo, lleguen a percibirse más atrás que sus hermanos de gama, para lo que los coreanos han puesto remedio.
El exterior, por su parte, apenas se ha tocado más allá de algunos elementos decorativos o afilar ciertos apéndices. El frontal inserta ahora una moldura decorativa horizontal en la zona inferior, que se presenta como un particular elemento que da una presencia aventurera al Tucson y resalta su anchura. Además, su famosa parrilla donde se insertan sus grupos ópticos diurnos también ha sido levemente retocada.
Exterior e interior actualizados
En su trasera sucede lo mismo que en el frontal, pues la mencionada moldura inferior cruza todo el bajo del vehículo (también en las taloneras laterales) y en la zaga acoge unos particulares escapes decorativos. Sus faros también ha sido mínimamente retocados y parte de su parachoques ahora cuenta con unas líneas más rectas y agresivas. Las llantas, por su parte, también son de nuevo diseño, aunque desde Hyundai no aseguran un diámetro concreto.
En términos generales, el nuevo Hyundai Tucson abraza el lenguaje de diseño Parametric Dinamics, que también se ha dibujado en modelos de nueva factura, como el Kona, el IONIQ 5 o el IONIQ 6. Esto no modifica sus cotas actuales, las cuales siguen siendo de 4,5 metros de longitud, 1,86 metros en su anchura y 1,65 metros para su altura. El nuevo lengujae se deja notar aún más en un interior totalmente renovado.
Pasando al habitáculo, este es el espacio donde mayores novedades se encuentran. Concretamente, todo el salpicadero ha sido rehecho. Su famosa pantalla central queda eliminada en favor de un doble panel horizontal, que cuenta con la apariencia de ser una única pantalla. Esta se divide en instrumentación digital y el info-entretenimiento. También, en la zona baja de estos, se ha acoplado un módulo de climatización: un elemento hasta ahora con diales táctiles y que pasa a contar con botones y regulaciones físicas.
La compañía no ha especificado que se hayan modificado las dimensiones o medidas interiores del Tucson, por lo que sus espacios deberían ser idénticos al modelo actual. Estos apartados han sido más que relevantes para declararse como el SUV compacto más vendido de Europa en 2022 con un total de 116.738 matriculaciones, superando así a otras alternativas, como el Toyota RAV4, el Ford Kuga o el Volkswagen Tiguan, por ejemplo.
Sobre su mecánica, tampoco se espera cambio alguno. La compañía no ha confirmado ninguna alteración a este respecto, por lo que seguirá contando con alternativas de gasolina y diésel apoyados en un sistema Mild-Hybrid, una variante híbrida autorrecargable y, por último, un híbrido enchufable. El modelo debería estar disponible para su adquisición a partir de mediados del próximo año 2024. Sobre su precio aún nada se sabe, aunque no debería cambiar demasiado con la factura actual.
