Como fruto de la necesidad de una movilidad más limpia y sostenible, en el Sur de Europa ha nacido el Proyecto "E-VIA FLEX-E", una iniciativa que probará la viabilidad de una red de recarga ultrarrápida para coches eléctricos que conectará España con Francia e Italia.
Con un presupuesto de 6,9 millones, de los cuales 3.345.000 euros son cofinanciados por la Comisión Europea, el primer paso del proyecto prevé la instalación de puntos de recarga ultrarrápida en 14 ubicaciones en países del Sur de Europa: 8 en Italia, 4 en España –que se localizarán en estaciones de servicio Repsol– y 2 en Francia. Todos ellos de alta potencia, desde 150 kW hasta 350 kW, y todos ellos situados en vías rápidas.
Ibil, empresa especializada en servicios de recarga de vehículos eléctricos, es la única empresa española que participa en el Proyecto "E-VIA FLEX-E", un programa de ámbito europeo que busca poner a prueba una red de carga ultrarrápida que permita a los nuevos vehículos eléctricos, con un rango mayor de 300 kms, viajar largas distancias pudiendo recargar el vehículo en tan solo unos minutos.
Según Jorge Ramos, CEO de Ibil, "la participación en este proyecto de ámbito europeo, consolida a IBIL como actor clave de la movilidad eléctrica, además de permitirnos incorporar a nuestra red y ofrecer a nuestros clientes las primeras 4 ubicaciones con carga ultrarrápida en España".
Además de Ibil, el proyecto está coordinado por la energética italiana Enel en colaboración con compañías de la talla de EDF, Enedis, Verbund, Nissan y Groupe Renault.
El Proyecto E-VÍA se enmarca dentro de las ayudas del programa Connecting Europe Facility (CEF), que busca extender la interconexión europea en base a criterios de sostenibilidad y ecología.