Jeep es una marca muy especial en sí misma. Los de Toledo, Ohio, tienen que cambiar de rumbo sin perder de vista su historia. Su gran aportación al mundo son los todoterrenos y aunque esa rama ha ido disipándose poco a poco en los últimos años, el futuro sólo tiene un enfoque, eléctrico. La compañía ya había aportado detalles concretos para electrificar varios segmentos importantes, pero hasta ahora no había concretado nada con respecto al segmento más prioritario de todos, el de los B-SUV. Ahora, ya confirmado, podemos saber que el Jeep Renegade se convertirá en el ansiado SUV eléctrico de 25.000 euros de la casa americana.
Eso supone un cambio de guión significativo para uno de los coches más populares de la marca. Su lanzamiento original se produjo en el año 2014 y fue para muchos el punto de inflexión que Jeep necesitaba para afrontar una nueva etapa más alejada del campo y más centrada en el volumen. Un B-SUV que, a pesar de su tamaño, seguía mostrando buenas aptitudes fuera del asfalto con los habituales detalles de la casa. Durante estos años, el Renegade se ha convertido en una pieza fundamental de la compañía, siendo el modelo más vendido de la casa en todos los mercados. Esa posición de honor le será ahora arrebatada por el Jeep Avenger.
Por debajo de 25.000 euros y un tamaño aproximado de 4,2 metros
De hecho, se pensaba que con la aparición del Avenger el Renegade iba a desaparecer, pero nada más lejos de la realidad. Durante la convención anual de Jeep, los de Ohio han dejado bien claro cuál es su estrategia de cara a los próximos años y en ella figura el Renegade. Sí que es cierto que la estrategia publicada se centra en Estados Unidos, pero desde su integración en la órbita del Grupo Stellantis, Jeep ha optado por una gama global. Todos los productos se venden en todos los mercados, salvo excepciones como el Avenger, que resulta demasiado pequeño para Norteamérica y del Grand Wagoneer que se antoja excesivo para el Viejo Continente.
Tal y como especifican las diapositivas, el 2027 va a ser un año especialmente importante para los intereses de la marca. El plan consiste en alcanzar un 85% de cobertura del mercado ofreciendo productos renovados y una familia de modelos mayor. La familia estará estructurada en dos ramas claramente definidas. Por un lado están los modelos puramente off-road como el Wrangler, que contará con una versión 100% eléctrica, y el Gladiator. El resto de la familia se compartimenta en los habituales segmentos de mercado, siendo el segmento B el que debe centrar toda nuestra atención.
En él vemos el relanzamiento del Renegade, mientras que en otra diapositiva se especifica que el pequeño SUV contará con una versión totalmente electrificada cuyo precio de venta objetivo es inferior a los 25.000 dólares. Dicho modelo también estará presente en Europa, por lo que se sumará a la oferta EV de la casa, formada inicialmente por el Avenger, el Recon y el Wagoneer S, además del Renegade, claro está. Se espera que haga uso de la plataforma eléctrica compartida de Stellantis, STLA-Small. Esto le permitirá tener acceso a la más joven tecnología y la oferta mecánica más amplia de todas. Es posible que primero se lance en Europa y después en Estados Unidos, aunque Jeep no ha comentado nada al respecto.