El nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, es un firme defensor de las energías bajas en emisiones y, a diferencia de su predecesor, asegura estar comprometido para mitigar el calentamiento global. Y en esta línea, en una de sus últimas declaraciones, Joe Biden ha anunciado que renovará toda la flota de vehículos oficiales federales del país por vehículos eléctricos: la friolera de más de 645.000 vehículos.
Joe Biden está comprometido -o al menos parece estarlo- con la reducción de emisiones de efecto invernadero para mitigar el calentamiento global que nos afecta a todos. En sus primeros días como presidente, una de las primeras medidas a nivel medioambiental ha sido reincorporar a Estados Unidos en el Acuerdo de París, tratado del cual la administración Trump anunció su retirada (aunque no se llegó a hacer efectiva por diversos motivos).
Biden está a dispuesto a continuar las políticas medioambientales de Obama, algo que se ha transmitido también en la cotización en Bolsa de compañías relacionadas con energías renovables, coches eléctricos e industrias relacionadas, y su último anuncio tiene una importante relevante para el vehículo eléctrico. Y es que Joe Biden ha anunciado que renovará toda la flota de vehículos federales de Estados Unidos para tener una flota federal de vehículos eléctricos exclusivamente.
Joe Biden, que durante su campaña hizo mención en varias ocasiones a los vehículos eléctricos fabricados en Estados Unidos, reiteró su intención de implantar dicha flota con vehículos eléctricos fabricados en Estados Unidos. «El gobierno federal posee una enorme flota de vehículos, que reemplazaremos con vehículos eléctricos limpios fabricados aquí en Estados Unidos por trabajadores estadounidenses creando millones de empleos», dijo el presidente estadounidense en rueda de prensa.
Pres. Biden: "The federal government also owns an enormous fleet of vehicles, which we're going to replace with clean electric vehicles made right here in America, by American workers."https://t.co/figJbDMrpt pic.twitter.com/racgwk9VGw
— ABC News Live (@ABCNewsLive) January 25, 2021
Según el último informe publicado por la administración pública, la flota federal estadodunidense tiene más de 645.000 vehículos, de los cuales 245.000 son vehículos civiles, 173.000 son vehículos militares y alrededor de 225.000 trabajan en el correo postal de la Oficina de Correos.
Renovar una flota de este calibre, con más de 640.000 vehículos de diversa índole y condición, no es baladí. Joe Biden no hizo mención a los plazos, porque realmente es más complicado de lo que cabría esperar. Los más fáciles de sustituir son, a priori, los vehículos de reparto de la Oficina de Correos estadounidense: en su mayoría furgonetas Grumman poco eficientes y con tres décadas o más de antigüedad a las espaldas. Además, el trabajo diario que realizan, con muchos arranques y paradas, es ideal para una furgoneta eléctrica.
En otros casos, sin embargo, es más complicado que se sustituyan a corto plazo: en algunos casos, supondría un coste muy elevado retirar antes de tiempo ciertos vehículos de poca antigüedad. En otros, como vehículos militares o altamente especializados, requieren de tiempo para completar su desarrollo como vehículos eléctricos adaptados perfectamente a los requisitos de la administración. En cualquier caso, una flota de este calibre con mayoría (o la totalidad) de vehículos eléctricos debería suponer un ahorro de costes en combustible muy importante a largo plazo.
De momento, el anuncio de Biden es solamente eso: un anuncio. No ha hablado de fechas, ni siquiera a largo plazo, pero el Secretario de Transporte de Biden, Pete Buttigieg, también ha manifestado su deseo de dar un impulso a los vehículos eléctricos, asegurando que quieren poner «millones de coches eléctricos» en las carreteras estadounidenses.