Hace tan solo unos días os anunciábamos que Audi había llamado a revisión en Estados Unidos al e-tron, su primer modelo completamente eléctrico, por un problema en la toma de carga. El fallo radicaba ni más ni menos en un defecto en el sellado que podría dejar filtrar agua, permitiendo que esta llegase hasta las baterías y el circuito eléctrico. Y, como todos sabemos, agua (o humedad) en las baterías es lo último que queremos, pues la consecuencia, en el peor de los casos, puede llegar a ser un incendio del coche.
Tras el anuncio de la llamada a revisión por parte de la división americana de Audi, desde el equipo de comunicación del fabricante de los cuatro aros han anunciado ahora que están valorando hacer extensiva la llamada a revisión a los e-tron vendidos en Europa. Así lo ha confirmado Udo Ruegheimer a Automotive News, quien ha asegurado estar ya en conversaciones con las autoridades alemanas para valorar el alcance del problema. Solamente en Alemania podría haber 2.300 unidades afectadas, y unos 7.000 coches aproximadamente en todo el mundo, aunque Audi aún no ha confirmado cifras.
Este defecto en el sellado de las baterías fue detectado en 540 de las 1.644 unidades del Audi e-tron que se han comercializado en Estados Unidos, pues no todos los e-tron montan el ojal de sellado potencialmente defectuoso. Audi declaró haberse tomado el asunto con máximo celo y cautela, asegurando que, pese al riesgo potencial, no se ha reportado ningún incidente provocado por este fallo. Así mismo, Audi confirmó que tendría disponible la solución para el mes de agosto y que, hasta entonces, los clientes pueden seguir circulando con normalidad con sus e-tron. No obstante, Audi ofrecerá a sus clientes norteamericanos un coche de sustitución (con motor térmico) y 800 dólares a modo de compensación por los gastos de combustible en caso de no querer utilizar su e-tron hasta que sea revisado.
Por otro lado, desde la marca han anunciado que el Audi e-tron dispone de un testigo luminoso de color amarillo en el cuadro de instrumentos que se ilumina cuando los sensores detectan humedad en el sistema eléctrico. En caso de que dicha luz amarilla se activase, debe estacionarse el vehículo en un lugar al aire libre y apagarse. Acto seguido, el cliente debe ponerse en contacto con el servicio de asistencia en carretera de Audi para que remolque el vehículo hasta su centro más próximo, ya que no es aconsejable cargarlo hasta que sea revisado.
En caso de ser propietario de una unidad afectada por este fallo, Audi se pondrá en contacto con el cliente vía correo electrónico y telefónica.