Renovarse o morir. Es la filosofía que parece haber aflorado en muchos fabricantes, incluidos los más independientes o los más ajenos a la cotidianidad. Es el caso de Lotus, fabricante reconocido por sus pequeños, ágiles y poco prácticos deportivos, cuyo porvenir depende de como se adapte a los gustos y necesidades del mercado. Y eso implica fabricar un SUV, con propulsor eléctrico, que ya tiene fecha de presentación.
La propietaria de Lotus, la compañía china Geely, dice que quiere convertir Lotus en una «marca de lujo líder a nivel mundial». Para ello no basta hacer deportivos con pedigrí, así que se han lanzado a la piscina con un nuevo modelo, ni más ni menos que un SUV eléctrico. El tipo de carrocería favorita del mercado asociado al tipo de propulsor que demandan los tiempos actuales -y futuros-.
Según ha podido saber Autocar, Lotus presentará este nuevo modelo en 2022 y contará desde su lanzamiento con un propulsor totalmente eléctrico, en lugar de la mecánica híbrida que había barajado anteriormente. Este SUV, cuyo proyecto lleva el nombre 'Lambda' a nivel interno, se pondrá a la venta en 2023 y está llamado a multiplicar el volumen de ventas de Lotus de las 1500 unidades anuales de la actualidad a unas 5000 en un futuro no muy lejano.
El SUV eléctrico de Lotus tendrá su principal mercado en China, donde la demanda de vehículos premium, por un lado, y de coches eléctricos, por otro, es muy importante. También Estados Unidos está entre los destinos prioritarios de este modelo.
Todavía no está claro dónde se fabricará el modelo; por un lado, es viable producirlo en Hethel, en la sede de Lotus, llevando a cabo las renovaciones pertinentes en la línea de producción, ya que tiene capacidad para unos 10.000 coches al año. Sin embargo, es bastante probable que Geely opte por llevarse la producción a su nueva fábrica de Wuhan (China), con capacidad para 150.000 coches al año, donde está previsto que fabrique modelos para el mercado nacional.
En cuanto a las especificaciones y datos técnicos del coche, Autocar se atreve ya a hablar de versiones de hasta 760 caballos de potencia y una autonomía próxima a los 600 kilómetros. Aunque son cifras lógicas habida cuenta de las que manejan sus potenciales rivales, todavía no hay nada confirmado por parte de Lotus. Lo que sí parece claro es que se construirá sobre la nueva plataforma LEVA para coches eléctricos, que ha sido cofinanciada por el propio Gobierno de Reino Unido. También que el desarrollo y la puesta a punto se llevará a cabo por los ingenieros de Lotus en Inglaterra, y es indudable su tecnología eléctrica beberá de la experiencia del espectacular Lotus Evija y de las sinergias con Polestar y Volvo (propiedad también de Geely).