La industria de la automoción está cambiando drásticamente a lo largo de los últimos años. El desarrollo del coche eléctrico no parece tener límites y, sin duda alguna, nos encontramos en un proceso de estandarización de esta tecnología. Esto implica que todos los segmentos deben adaptarse a las necesidades del público que aboga por el coche eléctrico. En esta lista de nichos de mercado debemos incluir, claro está, los coches fúnebres. ¿Montarse por última vez en un vehículo sin emisiones contaminantes? Ya es posible.
Hace un tiempo vimos cómo una empresa carrocera estaba produciendo los primeros Tesla Model S para operar como coches fúnebres. En el día de hoy queremos traerte cómo se ve un Ford Mustang Mach-E bajo esta carrocería. Se trata de una apuesta que permite comprender hasta qué punto de rápido está creciendo el mercado del coche eléctrico. Veamos, con más grado de detalle, qué es lo que ofrece a cambio esta unidad.
Así se ve el primer Ford Mustang Mach-E pensado para servir como coche fúnebre
Es cierto que se trata de un sector muy específico, pero lo cierto es que ya están comenzándose a ver unidades puramente eléctricas. Cazado por primera vez en Reddit, se puede observar cómo se han efectuado los cambios necesarios para servir como coche fúnebre. Dar el último paseo sin emitir una sola partícula de contaminación y en silencio parece ser el deseo de cada vez más personas. Este modelo en particular parece haber perdido la condición de SUV con tal de adaptarse a las exigencias del producto.
Tal y como se puede observar en la imagen que comanda la noticia, el resultado encaja a la perfección con las expectativas. La presencia de una cierta distancia al suelo permite introducir y sacar el ataúd con una mayor facilidad. Del mismo modo, dispone de todas las medidas necesarias para garantizar la privacidad durante los desplazamientos con el féretro en su interior.
Siendo de color negro, se ha tenido que modificar notablemente la carrocería para poder albergar la longitud del cuerpo de la persona fallecida. Curiosamente, se ha respetado la segunda fila de asientos, un elemento que suele quedar en un segundo plano entre los carroceros profesionales que se dedican a este tipo de construcciones.
Ciertamente, esta configuración le sienta muy bien a la concepción eléctrica, ya que permite contar con un espacio mucho más amplio para poder incluir un mayor número de celdas de batería. Por otro lado, todo parece indicar que se desaprovechará una de las principales cualidades de esta tecnología, es decir, la posibilidad de contar con el máximo par posible desde la primera revolución.