CATL ha entregado las primeras celdas de batería LFP a Tesla, para que, una vez empaquetadas, se instalen en los coches eléctricos que se fabrican en la Gigafactoría de Shanghái. La nueva instalación, que comenzó a construirse en agosto de 2021, ha progresado rápidamente, de manera que según los medios locales ya se encuentra funcionando a un 60 % de su capacidad. Una vez a pleno rendimiento, será capaz de suministrar celdas LFP (litio-ferrofosfato) suficientes para las baterías de 800.000 coches eléctricos de Tesla.
El portal web Shanghai Observer, cita fuentes internas de CATL para adelantar esta información. En realidad, CATL no ha revelado en ningún momento la capacidad de producción real de su nueva fábrica cuando esté funcionando a pleno rendimiento, por lo que la cifra del 60 % es una estimación aproximada. El anuncio realizado por CATL en el verano del año pasado se refería únicamente a la construcción de la fábrica, y en ningún momento se refirió a su capacidad total. Los rumores, no confirmados, afirmaban que alcanzaría los 80 GWh anuales.
Al igual que la Gigafactoría de Tesla en Shanghái, las condiciones de la instalación han permitido a CATL arrancar rápidamente la producción. Se encuentra en el parque industrial Lin-gang Special Area, en un edificio ya existente, por lo que los trabajos de acondicionamiento solo han sido necesarios en el interior, lo que le ha ahorrado a la empresa los siete u ocho meses que lleva la construcción del edificio.
En junio de 2021, Tesla y CATL firmaron un acuerdo de suministro de celdas de batería que se extiende desde enero de 2022 hasta diciembre de 2025. En ese momento no se proporcionaron detalles sobre el volumen de suministro acordado y la química de la celda, pero en octubre se desveló que, solo en 2022, Tesla había realizado un pedido de 45 GWh de capacidad en celdas LFP. Según el tamaño de las baterías LFP en los modelos de Tesla actuales, esta cantidad debería ser suficiente para aproximadamente 800.000 vehículos. Dado que Giga Shanghai está diseñada actualmente para fabricar más de 450.000 vehículos, algunas de estas celdas deberían instalarse en vehículos fabricados en otras plantas del fabricante americano.
Tesla Model 3 con baterías LFP de CATL.
Hasta la puesta en marcha de la Gigafactoría de Shanghái, Tesla solo había recurrido a Panasonic como proveedor exclusivo de las celdas de las baterías de sus coches eléctricos. Pero la fuerte demanda y la necesaria reducción de costes, obligó al fabricante californiano a negociar contratos de suministro con otras empresas: LG Energy Solution (celdas de litio) y CATL (celdas LFP). Sin embargo, CATL no es el único proveedor al que ha recurrido para este tipo de tecnología. En agosto de 2021, una información desvelaba que Tesla había firmado un segundo contrato con BYD para que este le suministrase 10 GWh de sus celdas Blade, que también emplean tecnología LFP, aunque por ahora no se ha confirmado la noticia.
En noviembre de 2021, CATL tenía una capacidad de producción instalada de 11,45 GWh, según cifras de la Alianza de Innovación de Baterías Automotrices de China (China Automotive Battery Innovation Alliance). Esto convierte a esta empresa en el mayor fabricante de celdas de batería de China con una cuota de mercado del 55 %. Le sigue BYD con el 18,6 % y CALB y Gotion con el 5,2 % cada una. SVOLT tiene el 2,7 %, Farasis el 1,6 % mientras que la coreana LG Energy Solution, con sus plantas en China, representa el 1,2 % de su mercado.
