Maserati vive una nueva etapa dorada de la mano de la electrificación. La marca del tridente afincada en Módena tiene como objetivo convertirse en una marca 100% eléctrica en el año 2030. Un cambio radical que no dejará de lado las premisas básicas que acompañan a la casa desde su fundación. El Maserati GranCabrio Folgore será uno de esos modelos que generen una intensa imagen de marca. Un deportivo descapotable con diseño italiano y un rendimiento capaz de dejar en el olvido cualquier época pasada. Su desarrollo lleva en marcha muchas veces, y esta vez los italianos nos han dejado verlo en una de sus etapas.
Para Maserati supone un cambio radical de mentalidad. Para una marca como la suya, los cambios no suelen excesivamente drásticos o exagerados ya que su clientela es más conservadora de lo habitual. Sin embargo, en Módena han pensado que o tomaban esta decisión o podrían estar destinados a la más absoluta desaparición. Con el apoyo del Grupo Stellantis, Maserati es una de las primeras marcas de lujo que abrazan completamente la electricidad. Lo harán de forma paulatina a lo largo de los próximos años, pero en 2030 no habrá vuelta atrás.
En esa estrategia los Maserati GranTurismo y GranCabrio jugarán un papel muy importante, aunque las mayores ventas se las llevarán modelos como el Maserati Grecale, que también tiene versiones electrificadas, o el Levante, que fue el primer SUV de la casa en recibir un esquema híbrido. Muchos cambios en muy poco tiempo, pero cada uno de ellos pensado y evaluado para la futura etapa eléctrica de la categoría. En cuanto a diseño, a tenor de lo que podemos ver en las imágenes publicadas, el GranCabrio ofrecerá un aspecto muy similar al GranTurismo. Líneas afiladas y elegantes que rápidamente se identifican con un estilo italiano.
A pesar de lo que pueda aparentar en las imágenes, se trata de un deportivo descapotable bastante grande, cercano a los 4,96 metros. Con una configuración 2+2, las plazas traseras serán prácticamente inútiles, al igual que el volumen de carga se verá drásticamente mermado por la presencia de todo el mecanismo de la capota de lona. La verdad es que tampoco es que importe mucho perder espacio porque este coche se basará exclusivamente en las prestaciones. Imaginamos que Maserati montará el mismo esquema eléctrico que ya pudimos conocer oficialmente en el GranTurismo Folgore, aunque la carrocería y el chasis deberán ajustarse por la ausencia de un techo rígido.
De cumplirse con lo prometido, estamos hablando de un esquema eléctrico con tres motores, uno en el eje delantero y dos en el posterior. Juntos desarrollan una potencia máxima de 761 caballos y 1.350 Nm de par motor. De cero a 100 kilómetros por hora en menos de 3 segundos y velocidad punta superior a los 300 kilómetros por hora. Se espera que la batería también sea la misma; una pila de iones de litio con 83 kWh de capacidad neta que ofrecerá autonomías ligeramente inferiores al reducir su eficiencia aerodinámica con el techo descubierto.
Por el momento, Maserati no ha dado detalles importantes sobre fechas de lanzamiento o precios de venta. Se espera que el GranCabrio, incluyendo la versión Folgore,se presente en el primer tercio del año que viene, aunque su producción no arrancará hasta después del verano. Los clientes potenciales serán los primeros en conocer el resultado definitivo una vez se complete todo el programa de pruebas. El precio debería rondar los 180.000 euros, aunque es probable superar los 200.000 euros para la versión Folgore que se situará como la más extrema de toda la gama.
