Zéda, así se escribe en dialecto modenés la última letra del alfabeto. Y también así se escribe el apellido del último Maserati GranTurismo que se fabricará de la actual generación. La compañía italiana nos ha enseñado al Maserati GranTurismo Zéda, un ejemplar único con una llamativa pintura en tres tonos que se ha fabricado para celebrar el fin de la producción y anticipar la llegada del próximo GranTurismo, que tendrá versión puramente eléctrica.
El Maserati GranTurismo Zéda se trata de un one-off, es decir, una creación única de la que solamente existe un ejemplar. Su exterior ha sido diseñado por el Centro Stile Maserati y sus tres colores representan el pasado, el presente y el futuro de la marca. Un futuro que abrirá las puertas a una nueva era para el fabricante modenés: la era de la electrificación de Maserati.
Si miramos el coche desde la parte trasera hacia la delantera, las superficies pasan de un efecto satinado claro a un color metaluro bruñido. La parte central se transforma haciéndose más profunda y llegando al azul Maserati más energético, más eléctrico. Antes de su previsible estancia en un museo, el GranTurismo Zéda dará una vuelta al mundo conmemorativa.
Maserati GranTurismo Zéda, con tres colores que representan el pasado, el presente y el futuro.
El final de la producción del Maserati GranTurismo y del GranCabrio representa el inicio de una nueva etapa en la fábrica de Maserati en Módena. Desde ahora, darán comienzo los trabajos de renovación de las líneas de producción que albergarán la construcción de un nuevo deportivo cuyo lanzamiento está previsto para el año 2020. Por otro lado, en Turín se fabricarán los próximos GranTurismo y GranCabrio de nueva generación, que serán los primeros modelos en la historia de la compañía en adoptar una motorización 100% eléctrica.
Se retira uno de los coches más veteranos del mercado
El Maserati GranTurismo era uno de los modelos más veteranos del mercado, no sólo entre los deportivos sino a nivel general. Este coupé de cuatro plazas y esculturales líneas -obra de Pininfarina- fue presentado en el Salón de Ginebra del 2007, hace casi trece años. El GranCabrio se presentó en Frankfurt dos años después.
Nacido como una interpretación moderna del Maserati A6 1500 del 1947, este GT montaba un V8 atmosférico de Ferrari (el mismo que el F430) que en sus últimos días entregaba 460 CV de potencia a 7.000 rpm y 520 Nm de par con un cubicaje de 4,7 litros. Con el último restyling se mejoró la aerodinámica, la ergonomía a bordo y se actualizó su vetusto sistema multimedia. No obstante, las actualizaciones siempre han sido leves y el GranTurismo ha permanecido casi inalterado durante su ciclo comercial.