A dos horas y media en coche al sureste de Bangalore, en India, se extiende el terreno donde se levantará una mega fábrica de 330 millones de dólares. Para Bhavish Aggarwal, el empresario artífice del proyecto, supone una incursión en territorio desconocido -a pesar de haber pasado diez años construyendo un gigante del transporte por carretera-. Ahora, su nueva empresa, Ola Electric, se introduce en un mercado de vehículos eléctricos que ya está repleto de nombres, y lo hará a lo grande: construyendo la mayor fábrica de scooters eléctricos del mundo.
Ola Electric desembarca en el mundo de la movilidad eléctrica con un humilde vehículo de dos ruedas; el mercado de motocicletas en India es de proporciones colosales y el de vehículos en general tiene un enorme potencial de crecimiento. Algunos expertos estiman que la industria nacional de vehículos eléctricos alcanzará un volumen de negocio de 200.000 millones de dólares en una década.
Objetivo: fabricar 10 millones de scooters al año en 2022
El fundado de Ola Electric espera construir la mayor planta de scooters eléctricos en un terreno a las afueras de Bangalore, ahora semi vacío y con las obras en ciernes, de más de 200 hectáreas de superficie. El objetivo es producir 2 millones de scooters al año cuando se inaugure la fábrica, pero eso es solamente el principio.
Recreación digital de la fábrica de Ola Electric cuando esté finalizada.
Si todo va según lo previsto, la compañía Ola Electric Mobility Pvt espera comenzar las ventas en el extranjero a finales de este mismo año y fabricar 10 millones de scooters eléctricos al año para el verano de 2022. Dicho de otra manera, supondrá producir el 15 % de todos los scooters eléctricos a nivel mundial. O lo que es lo mismo: un scooter cada dos segundos tras la ampliación de la planta el año que viene. Para Aggarwal, ese es sólo el primer paso en en su estrategia de ensamblar, más adelante, una gama completa de coches eléctricos.
El joven empresario asegura que su scooter será un vehículo «diseñado desde cero para que la India pueda sentarse en la mesa mundial de los vehículos eléctricos». Aggarwal quiere lanzar cinco modelos de dos ruedas al principio, incluyendo versiones de bajo coste para el mercado de masas y algún modelo premium. Ola Electric tendrá que hacer frente a la competencia no sólo de sus rivales locales, Hero MotoCorp y Bajaj Auto, sino también de empresas emergentes como Ather Energy y marcas chinas como Niu Technologies. También habla de fabricar sus primeros coches eléctricos en alrededor de dos años.
La mega fábrica contará con 10 líneas de producción.
No será un reto sencillo. Los vehículos eléctricos representan actualmente menos del 1 % de todos los automóviles vendidos en India, según datos de la consultora KPMG y la Confederación de la Industria India. Las scooters y motocicletas de gasolina siguen siendo el modo de transporte más popular en las grandes ciudades de la India, 21 de las cuales estaban entre los 30 centros urbanos más contaminados del mundo en 2019. La incipiente clase media india se preocupa por la calidad del aire, pero a día de hoy son reacios a desembolsar el doble del precio de una scooter de gasolina por una eléctrica.
Sin embargo, las scooters eléctricas podrían representar entre un 25 y un 35 por ciento del mercado de las dos ruedas en 2030, y los vehículos de tres ruedas -muy populares en India- entre un 65 % y un 75 % para entonces. Un precio de compra asequible será una de las claves para abrirse paso en el mercado indio. Aunque Aggarwal aún no ha detallado los precios de sus scooters, asegura que su producto competirá con las scooters tradicionales de gasolina, que cuestan unos 1.000 dólares cada uno. «Bajaremos los costes jugando a escala».
Diseño y desarrollo propios, desde el motor hasta las celdas de la batería
Para mantener los costes bajo control, Ola Electric está diseñando, desarrollando y fabricará el motor eléctrico, el sistema de la centralita y el software de sus scooters. También fabricará sus propias celdas de batería y aseguran estar probando distintas soluciones de carga y estaciones de intercambio de baterías. El año pasado Ola Electric adquirió la empresa de scooters Etergo BV, con sede en Ámsterdam, para dar el primer paso en la fabricación propia de scooters.
Scooter eléctrica de Ola Electric.
La fábrica de Ola contará con 10 líneas de producción y más de 3.000 robots que trabajarán junto a 10.000 trabajadores. Un software creado por su equipo de 1.000 miembros -la mayoría ingenieros- repartirá el trabajo de la manera más eficiente. El techo de la fábrica estará cubierto de paneles solares y toda la planta en su conjunto será "negativa en carbono", es decir, emitirá menos carbono del que podrá absorber gracias a las 40 hectáreas de bosques que se plantarán alrededor de la fábrica y a los 8.000 metros cuadrados de superficies verdes en el interior de la misma.
Dos parques de proveedores situados en los extremos del complejo fabricarán aproximadamente la mitad de los componentes necesarios para los scooters. Ola Electric, que en los últimos años ha recibido respaldo financiero multimillonario por parte de SoftBank, también se ha asegurado capital del Grupo Hyundai Motor Co. y, más recientemente, de otras grandes compañías que no han querido publicar.
La fábrica de Ola Electric en 10 claves:
- 174.000 metros cuadrados de superficie
- 3000 robots con Inteligencia Artificial
- 10.000 empleados
- 10 líneas de producción
- Capacidad de producción de 10 millones de motos eléctricas al año
- 8.000 metros cuadrados de superficie verde en el interior de la fábrica
- 40 hectáreas de bosques alrededor de la fábrica
- Ensamblaje del motor eléctrico totalmente automatizado
- 20 % de la energía obtenida con las placas fotovoltaicas del tejado
- Huella de carbono neutra
Fuentes: Ola Electric, Yahoo Finance