El conocido productor de baterías para coches eléctricos, Northvolt, se prepara ejecutar un un movimiento que, por desgracia, viene siendo un habitual en la industria en los últimos meses. La compañía ha comparecido oficialmente para anunciar que reducirá su plantilla de trabajadores, así como el nivel de producción estimado para los próximos años. La causa de todo esto es la de siempre: el estancamiento en las ventas de vehículos eléctricos en todo el mundo, especialmente en Europa.
Esto es algo que ya se ha dejado ver en otras compañías de coches eléctricos, o que están relacionadas con este sector. Concretamente, el más llamativo y reciente ha sido el caso del Grupo Volkswagen, aunque otras marcas, como Mercedes-Benz, no están pasando por su mejor momento vital.
Northvolt da un paso atrás en sus planes
“Estamos teniendo que tomar algunas medidas estrictas para asegurar las bases de las operaciones de Northvolt para mejorar nuestra estabilidad financiera y fortalecer nuestro desempeño operativo”, afirmó Peter Carlsson, CEO de Northvolt, en un comunicado reciente.
El pasado año 2022, Northvolt se hizo con una antigua fábrica de papel, en Borlange, Suecia. La intención de la compañía era convertir estas instalaciones en una fábrica de baterías para coches eléctricos, la cual iba a alcanzar una producción anual de 100 GWh e iba a dar trabajo a unas 1.000 personas. Por entonces, la proyección a 3 o 4 años vista era realmente favoreceroda, por lo que la compañía esperaba poder dar cabida al aumento de pedidos por valor de unos 45.000 millones de euros. Las operaciones en esta planta debían dar comienzo a finales de 2024.
Sin embargo, con la situación actual, Northvolt ha decidido dar marcha atrás en sus planes anunciados. Por ello, desde el propio gobierno municipal de Borlange han anunciado que pagará a la compañía casi 44 millones de euros por hacerse con parte de esta fábrica y su terreno. Esta parcela se venderá a otra empresa que tendrá una actividad que nada tendrá que ver con la propuesta por Northvolt.
Por otro lado, la empresa está pausando también sus operaciones sobre la planta de producción de Northvolt Ett Upstream 1, en Skelleftea, Suecia, hasta nuevo aviso. También está en búsqueda activa de socio para sus instalaciones de Polonia, con vistas a reducir el gasto en todas las áreas. Con todo ello, aunque no han especificado un número concreto, la compañía tendrá que prescindir de parte de su fuerza laboral en los próximos meses con vistas a “recuperar la rentabilidad financiera”, según afirmaron desde la compañía.
Los problemas se han acumulado para Northvolt
Este anuncio de Nortvolt han llegado después de que la compañía recibiera la cancelación de varias compañías automovilísticas de gran calado, como BMW o Scania. Además, el pasado mes de julio, la empresa dio a conocer una revisión en su plan estratégico en el que suspendían la construcción de nuevas fábricas en Alemania, Canadá o Suecia debido a que habían superado los 1.000 millones de dólares en pérdidas en el último año.