Cuando todo el mundo estaba esperando la versión de autonomía extendida del Mazda MX-30, el fabricante japonés ha sorprendido a todos anunciando una variante de este SUV eléctrico movida por un motor de combustión con tecnología microhíbrida. Una variante que, por ahora, parece destinada al mercado japonés y probablemente al estadounidense, en el que es dudosa la comercialización de la versión 100% eléctrica.
A la espera de la variante de autonomía extendida del MX-30, que puede ser más demandada que la versión totalmente eléctrica, algo corta de autonomía, en una rueda de prensa celebrada en Japón, Mazda ha sorprendido a todos con el anuncio de una versión híbrida suave de este SUV eléctrico que tanta controversia ha creado en el mercado.
Los detalles técnicos de esta nueva variante son bastante confusos, aunque es de suponer que heredará el motor Skyactiv-X del Mazda 3 o el CX-30. Se trata de un motor de gasolina, cuatro cilindros y 2,0 litros y un pequeño motor eléctrico que recupera la energía cinética generada durante el frenado. Esta electricidad se emplea para alimentar los componentes electrónicos del automóvil, y también se emplea para que el motor eléctrico coopere con el de combustión en los momentos en los que el conductor solicita energía extra mediante el acelerador. Su innovadora tecnología ofrece una potencia de 180 CV y que logra reducir su consumo en un 30% con respecto al eficiente motor de gasolina Skyactiv-G, con tan solo 5,4 l/100 km y unas emisiones de 96 g/km de CO2.
Sistema Skyactiv-X de 24 v del Mazda 3.
El precio de esta nueva variante del MX-30 debería ser considerablemente inferior al de la versión eléctrica y al de la futura variante de autonomía extendida. En España, el Mazda MX-30 parte de 34.375 euros para el acabado Origin, que monta de serie llantas de 18", head-up display, sistema multimedia con pantalla de 8,8", compatibilidad Apple Car Play y Android Auto o reconocimiento de señales de tráfico, entre otros equipamientos. Los mercados en los que se comercializará no han sido anunciados. Si bien parece que Japón es uno de ellos, la insinuación de Mazda de que el MX-30 eléctrico no llegará a Estados Unidos hace suponer que sea esta la variante escogida para lanzar allí.
La controversia del MX-30
Con la batería de 35,5 kWh del MX-30 eléctrico, Mazda ha evidenciado su renuncia a las baterías de gran capacidad. Contradiciendo los estudios que demuestran que los vehículos eléctricos son más limpios que los de combustión a todos los niveles, Mazda equipara sus emisiones totales con las de un compacto como el Mazda 3 con motor diésel. En sus cálculos incluye las emisiones totales durante la vida útil del vehículo, y añade la fabricación y la eliminación de la batería, incluso teniendo que reemplazarla después de 160.000. Justifica su capacidad asegurando que la ha adaptado a las necesidades de los clientes, que precisan realizar con él recorridos urbanos y suburbanos.
Junto al motor eléctrico del Mazda MX-30 se situara en motor rotativo, de gasolina, que funcionará como extensor de rango.
Para aquellos que quieran ir más allá de la ciudad, Mazda recurre a un motor de combustión que funcionará como extensor de rango. Se trata de un pequeño motor rotativo de gasolina tipo Wankel (el nuevo Skyactiv-R) que solo generará electricidad para cargar la batería y no irá acoplado a las ruedas.