No hay semana en la que no hablemos de las capacidades de CATL como el mayor productor mundial de baterías para coches eléctricos. El gigante chino no levanta el pie del acelerador. Los planes de la compañía contemplan la expansión de sus actividades a nuevos continentes. Europa recibirá la mayor inversión en tierra extranjera de la compañía: CATL planea construir una gran fábrica de baterías en Hungría para abastecer rápidamente a sus socios comerciales europeos.
Seguro que recuerdas que hace no mucho, apenas unos días, te informábamos sobre una nueva planta de CATL en México. Contemporary Amperex Technology Co, más conocida como CATL, sabe de la importancia de desviar la producción a nuevos emplazamientos que se encuentren más cerca de sus compradores. En unos años la ampliación de la gama eléctrica en todas las marcas elevará el ritmo de producción de baterías. Es por eso que la compañía necesita no solo ampliar su capacidad de fabricación de celdas, sino acercarlas a la estación final de la cadena de montaje.
Los principales receptores de la nueva planta de Hungría serán Mercedes y BMW. Los alemanes, con una baja capacidad para fabricar sus propias celdas, necesitan la colaboración de otros socios. BMW y Mercedes no serán los únicos en recibir las cercanas baterías para sus coches eléctricos, ya que Volkswagen y las muchas marcas del Grupo Stellantis también verán reducido el tiempo de espera de las pilas necesarias para su cada vez mayor flota eléctrica. Un plan estratégico que CATL ha establecido de cara al año 2035, cuando Europa obligue a la venta exclusiva de coches eléctricos.
En cuanto a las nuevas instalaciones, CATL ha informado que los planes contemplan levantar la mayor fábrica de baterías en Europa. Ubicada en la ciudad de Debrecen, Hungría, se encuentra cerca de otros centros vitales de producción como la planta húngara de Mercedes en Kecskemet. Más cerca incluso está la planta de BMW en la misma Debrecen. De ella se espera que empiece a producir coches eléctricos a partir del 2025. Un centro de referencia al ser la primera planta ecológica del grupo, sin ninguna dependencia de combustibles fósiles.
La inversión total estimada ronda los 7.300 millones de euros y contará con una capacidad de producción de 100 GWh. Aunque no hay fechas concretas, los plazos estiman que una vez recibidos todos los permisos por parte de las autoridades locales y estatales, la fábrica podría empezar a producir las primeras celdas en un plazo de 64 meses, lo que supone que estaría completamente operativa a partir del 2027. Se trata de un hito muy importante para la compañía, tal y como ha comentado el fundador y presidente de la misma, Zeng Yuqun, a través de un comunicado: "supone un gran salto en la expansión global de CATL".
Recientemente hemos podido saber que la empresa de baterías CATL se ha establecido, una vez más, como la gran dominadora de la industria. Los resultados obtenidos durante el primer semestre del año establecen una cuota de mercado del 34,8%, lo que supone ampliar la ventaja con su más inmediato perseguidor, BYD, que debe conformarse con una cuota del 14,4%. Nada hace indicar que la brecha vaya a recortarse próximamente, pues CATL ha informado sobre las nuevas tecnologías en las que está trabajando. Como las nuevas y misteriosas baterías M3P o las nueva generación de pilas de carga ultrarrápida.