Cuando en su día Mercedes decidió lanzarse al mercado de los monovolúmenes convertidos en furgonetas muchos adelantaron un fracaso, pero el resultado ha sido bien diferente. La Mercedes Vito siempre ha tenido versiones de pasajeros, pero la Clase V es un vehículo completamente diferente. Desde el principio ha sido un éxito en todo el mundo y hoy es uno de los coches de representación más famosos del mundo. Mercedes no quiere tocar la Clase V, seguirá con vida muchos años, todos los que pueda. Los alemanes sólo evolucionarán la Mercedes EQV y estas primeras imágenes oficiales confirman que los trabajos ya están en marcha.
A mediados de 2022 los alemanes adelantaron la estructura comercial de su futura gama eléctrica. Sin embargo, en apenas dos años, el mundo ha cambiado mucho y no a favor de los intereses germanos. El objetivo de electrificación total para 2030 ya forma parte del pasado. En Múnich han vuelto a echar cuentas y como mucho esperan alcanzar un 50% de ventas eléctricas para finales de la década. La gama se apoyará sobre cuatro plataformas, al menos esa era la idea. Recientemente hemos sabido que los alemanes no trabajarán en su estructura superior. De hecho, el Mercedes EQS desaparecerá de la oferta comercial al ser absorbido por un Mercedes Clase S totalmente eléctrico.
Nueva plataforma de carga rápida con baterías de gran autonomía
Con respecto al EQV, el modelo de próxima generación, programado para el 2026, será el primero en estrenar la plataforma VAN.EA. Una arquitectura pensada exclusivamente para vehículos eléctricos industriales. Se fabricará en España, como hasta ahora, aunque los trabajos todavía tardarán más de un año en comenzar. A pesar de ello, ingenieros y pilotos de pruebas ya tienen un modelo construido sobre el cual poner en práctica todas las lecciones y tecnología que quieren aplicar. Son fotos oficiales de Mercedes y si bien el camuflaje es muy extenso, sí que nos permite reconocer la figura clásica de un monovolumen de gran tamaño.
La forma estará condicionada por la función, pero en este caso lo importante se sitúa en la parte inferior. Todos los vehículos basados en el chasis VAN.EA contarán con la última versión del sistema operativo Mercedes-Benz, lo que promete una experiencia digital de vanguardia. Se trata de una arquitectura de 800 voltios capaz de ofrecer elevados ritmos de carga, hasta 22 kW en corriente alterna (todavía no hay datos para la corriente continua). Como hasta ahora, habrá diferentes versiones con uno o dos motores y baterías de diferente capacidad que permitirán ofrecer mayor o menor autonomía en función de las necesidades del cliente.
Hay que tener en cuenta que no sólo el futuro EQV aprovechará la plataforma VAN.EA, también harán gala de ella futuras remodelaciones de las Mercedes Vito y Sprinter. Toda la familia industrial se electrificará paulatinamente, aunque será la versión turismo la que demuestre todo el lujo que este tipo de vehículos pueden ofrecer. Se espera un gran conjunto técnico y tecnológico con sistemas de última generación. Mercedes ha prometido seguir dando datos en el futuro. Por el momento ha realizado pruebas muy duras, como viajar desde Stuttgart a Cabo Norte. El siguiente reto es Suecia y su clima helado durante la temporada de invierno que se avecina.