El año pasado, ante la avalancha de lanzamientos y presentaciones procedentes de China, Europa dio los primeros pasos para penalizar y minimizar el impacto de la industria automovilística china en el Viejo Continente. Desde Bruselas iniciaron una primera investigación para determinar si los fabricantes chinos estaban recibiendo el apoyo del Gobierno de Xi Jinping con la intención de desestabilizar las ventas en Europa. Esas pesquisas han terminado activando unos aranceles que afectan a la rentabilidad de las marcas, en especial de MG.
El Parlamento ha impuesto diferentes tramos y cantidades en función de la marca y del grado de implicación de esta en la investigación y en función de la ayuda recibida por el gobierno chino. SAIC Motor, marca principal de MG, ha sido la más castigada tras el anuncio de los nuevos aranceles portuarios. Tras ajustar los porcentajes, MG tiene que pagar un impuesto adicional del 37,6% por cada vehículo que cruce los límites de la Unión Europea. Cantidad que debe sumarse al 10% que ya estaba fijado. Casi un 50% de impuestos que ya afecta al balance de resultados.
Tailandia puede tener la llave para reducir los impuestos europeos
Aunque muchos analistas aseguran que las marcas chinas siguen ganando dinero con sus coches en Europa, muchas compañías han anunciado planes para derivar la producción y así no sucumbir a los impuestos fijados por Bruselas. Como ya hemos dicho, MG es la más perjudicada y, por lo tanto, la que más se está moviendo para buscar alternativas. La marca ya ha dejado claro que quiere abrir una fábrica en Europa, España es uno de los países mejor posicionados para albergar dichas instalaciones, pero ahora mismo, a corto plazo, necesita una solución más rápida para no seguir siendo castigada.
China ya ha advertido del riesgo de posibles represalias. En oriente ya preparan un plan de choque que podría afectar seriamente a los intereses de las marcas europeas en la región. MG, por su parte, está planteándose seriamente derivar las exportaciones desde Tailandia para así no pagar impuestos añadidos, opción que no está contemplada por la norma europea. MG (SAIC Motor) cuenta desde finales de 2023 con una gran fábrica operativa en Chonburi. Instalaciones de alto nivel que actualmente producen unidades de modelos muy importantes como el MG4 Electric o el MG3 Hybrid+. Modelos especialmente sensibles al precio.
Así lo han reconocido fuentes internas a medios locales. A pesar de este fundamental cambio, MG no lo tendrá nada fácil para cumplir con los requisitos fijados por Europa. La marca tendrá que garantizar que al menos el 40% de los componentes utilizados en el producto provengan de Tailandia y no de China, pues de lo contrario la ley europea considera que estamos ante un coche chino y, por lo tanto, debe pagar impuestos especiales. Además, Tailandia nunca ha exportado coches a Europa ya que no existen acuerdos comerciales entre las dos regiones. Por último, se estima que Tailandia podría enfrentarse a aranceles entre el 10 y el 20% si comienza a exportar al Viejo Continente. Una cifra elevada, pero menor a la que sufre ahora la compañía.