MINI tiene el objetivo de convertirse en una marca 100% eléctrica para finales de la década. Aunque las intenciones suenan ambiciosas, los ingleses, bajo el paraguas de BMW, aspiran a modificar gran parte de su gama de productos. En los próximos años veremos desaparecer carrocerías a la vez que se introducen nuevas. El MINI Vision Urbanaut es un monovolumen futurista eléctrico que vimos hace un año, un concepto al que MINI busca dotar de vida de la mano de un socio como Canoo.
Canoo se ha posicionado como una de las startup más interesantes del continente americano y una de las más atractivas en el mercado eléctrico. Su mentalidad contempla una plataforma sobre la que se posicionan diferentes carrocerías. Una especie de chasis con carcasas intercambiables. Muchos fabricantes tradicionales han puesto sus ojos en la empresa, y las nuevas informaciones apuntan a que MINI podría elegirle como socio para la producción del monovolumen Urbanaut.
Como ya hemos dicho, el concepto presentado hace un año hace referencia a un vehículo con avanzados sistemas de conducción autónoma que eliminan por completo la necesidad de conductor. Sin embargo, la unidad comercial que acabaría llegando al mercado sería mucho más tradicional en ese aspecto, aunque estaría impulsada por sistemas mecánicos 100% eléctricos. También cambiará de nombre, pasando a ser el MINI Traveller, que debería ver la luz pasada la mitad de la década.
En estos momentos MINI se encuentra buscando un socio comercial y productivo con el que explorar el concepto, y Canoo parece ser el más indicado para lanzar la propuesta en Estados Unidos. MINI no tiene fábrica en América del Norte, por lo que necesita que alguien produzca su monovolumen eléctrico. Es la misma estrategia que ya ha seguido en otros mercados como el chino, donde Great Wall se encargará de fabricar los próximos MINI Hatch y el MINI Aceman que fue presentado como concepto la semana pasada.
Más cambios para los próximos años
Y es que de cara a los próximos años MINI va a cambiar mucho su oferta comercial. Empezando por abajo, el MINI Hatch, el de tres puertas, contará con versiones térmicas y 100% eléctricas, como el actual Cooper SE, pero reducirá su tamaño para recuperar un poco la esencia original de la compañía. El MINI de 5 puertas cederá su sitio al Aceman, convirtiéndose en un B-SUV eléctrico que plantará cara a modelos importantes de la categoría como el Opel Mokka-e o el Peugeot e-2008.
El MINI Clubman directamente desaparecerá para que el Urbanaut/Traveller se convierta en el modelo más familiar de la casa. Por último está la cuestión del exitoso MINI Countryman. El SUV replicará la estrategia del BMW X1 e iX1. Mostrará versiones térmicas electrificadas y alternativas 100% eléctricas. Todo ello permitirá a MINI ganar cuota de mercado EV, mejorando su posición de cara al año 2030 cuando dirá adiós a los motores de combustión.
Fuente: Automobilwoche