Nissan ha desmentido la noticia que aseguraba que en su nuevo plan estratégico optaba por una progresiva reducción de su presencia en Europa y centrar sus esfuerzos en los mercados de Estados Unidos, Japón y China. Según Reuters, Nissan pretendía vender su factoría de Barcelona y apostar por sus dos SUV más vendidos, el Qashqai y el Juke, para mantener su presencia en Europa.
En una declaración realizada a Automotive News Europe, Nissan asegura que sigue totalmente comprometida con el fortalecimiento de su línea de productos en Europa, "como parte de nuestros esfuerzos continuos para hacer que el negocio sea más competitivo". Nissan presentará su plan de reestructuración el próximo 28 de mayo.
Según muestran los registros de la compañía, desde 2012, Nissan solo ha tenido un año rentable en la región europea, que incluye también a Rusia. Hasta finales de diciembre de 2019, Europa ha cosechado los peores resultados financieros de todos los mercados en los que opera Nissan, con unas pérdidas equivalente a 222 millones de euros.
Las ventas de Nissan en Europa dependen en gran medida de los dos SUV de tamaño compacto. El Juke, recibió en noviembre una nueva generación como un primer paso para renovar su línea europea, ha asegurado Nissan. Por otra parte, se espera que el nuevo Qashqai llegue en 2021 y que además esté disponible con versiones híbridas e híbridas enchufables.
Ambos modelos se fabrican en Sunderland, Inglaterra, que actualmente es la mayor fábrica de automóviles del Reino Unido. En el último año (considerando el periodo financiero japonés que finaliza en el mes de marzo), allí se fabricaron 325.243 automóviles, un 22% menos que el año anterior. La producción en la planta de Barcelona cayó un 38% el último año. En total se fabricaron 55.022 unidades, tras ser descontinuada la producción del Pulsar en 2018 y de la versión con motor de combustión de la furgoneta NV200 en 2019.