Hace tan solo unos días supimos que Nissan ya prevé el lanzamiento de su primer coche eléctrico con batería de estado sólido para 2028. De la misma manera, en unas últimas declaraciones han confirmado que gracias a este tipo de tecnología se dará continuidad al legado de sus históricos deportivos, aplicando una fórmula totalmente nueva para ellos pero con unas especificaciones y unas prestaciones por encima de lo conocido hasta ahora.
Nissan siempre se ha particularizado por ofertar modelos deportivos en su gama. Hasta estos últimos años, el Nissan 370Z compartía espacio con el todopoderoso Nissan GT-R, ambos ya fuera del mercado europeo y sin un por ahora sustituto a la vista. Sin embargo, esto podría dar un vuelco en los próximos años pues, en una reciente publicación por parte del medio Autocar, desde la directiva de la firma nipona sí estarían estudiando continuar con este legado de modelos de altas prestaciones una vez la electrificación se haya asentado definitivamente, es decir, a finales de esta década. Estos nuevos deportivos vendrán de la mano de una tecnología de mecánica eléctrica más desarrollada y evolucionada de la que conocemos actualmente, concretamente a través del uso de baterías de estado sólido.
Según afirmó François Bailly, vicepresidente senior y director de planificación de Nissan en Oriente Medio, India, Europa y Oceanía, la tecnología que está estudiando actualmente la compañía hará posible que estos modelos pasionales puedan llegar a contar con un peso contenido, eliminando así las trabas hasta ahora conocidas en modelos eléctricos a causa del lastre que provocan sus baterías. La próxima tecnología de electrolito sólido será la protagonista de los modelos centrados en las altas prestaciones, como el futuro Nissan GT-R.
Sin embargo, y aunque los planes de lanzar una serie de deportivos eléctricos están ahí, lo cierto es que el directivo de Nissan también confirmó que en un primer avance llegarían los modelos más convencionales, como el nuevo Nissan LEAF o el Nissan Micra eléctrico, ya que la prioridad para la compañía es poder comercializar modelos de gran tirada que, al fin y al cabo, suponga beneficios reales y estables. Por ello, según admiten, aún no están listos para presentar un plan específico sobre estos futuros deportivos eléctricos.
La cronología actual para las baterías de estado sólido de Nissan habla sobre una primera producción de pruebas para 2024, con vistas a que la tecnología esté lista para el 2026 y los primeros modelos de producción la empleen en 2028. Es decir, la demora para ver un sustituto espiritual del Nissan GT-R en versión eléctrica podría llevarnos hasta los últimos años de esta década, e incluso llegar durante el primer periodo de los 2030. Aún no queda claro si el nuevo GT-R llegará antes o después de una revisión eléctrica de la familia Z, ya que para el mercado fuera de Europa, la marca nipona sí que ha lanzado un nuevo modelo de este histórico legado, por lo que podrían alargar aún más su vida comercial hasta dar con una fórmula idónea para su venta como modelo 100% eléctrico.