En plena era de la transición hacia el vehículo 100% eléctrico, a algunos modelos les va llegando el final, al menos tal y como los conocemos. El paso intermedio, aunque no siempre, es ofrecer versiones híbridas, y las enchufables son una apuesta interesante para aquellos que quieran un automóvil con la etiqueta Cero de la DGT.
La tecnología PHEV no es nada nuevo, mucho menos para fabricantes como Volkswagen, que lleva años proponiendo variantes de este tipo en su catálogo. El último que ha hecho lo propio es el Golf, gracias al restyling de la octava generación, el último que utilizará motores combustión.
El compacto alemán lleva años demostrando su poderío en el mercado, pero tendrá que superar la prueba en su futura era 100% eléctrica. Mientras eso llega, sigue siendo una de las mejores alternativas a los SUV, y se ofrece ofrece con varias opciones electrificadas, dos de ellas de tipo híbridas enchufables.
El Volkswagen Golf PHEV mide 4,28 metros de largo, 1,79 metros de ancho y 1,46 metros de alto, como cualquiera de sus versiones, aunque el maletero sí que es más pequeño en este caso, de 272 litros de volumen aproximadamente.
Aunque hablamos de un nuevo ciclo comercial, estamos ante la actualización del Golf que se lanzó en 2020 y que, por tanto, le tocaba un lavado de cara. Repite la plataforma de construcción MQB, como ya hacía el Golf 7.
Por dentro, el nuevo Golf sí que se ha revisado bastante, con una dotación tecnológica amplia y el cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas de serie en todo caso, mientras que el sistema de infoentretenimiento puede ser de hasta 10 pulgadas.
La variante PHEV de acceso del compacto se llama eHybrid y dispone de un bloque de gasolina de 1,5 litros y 130 CV, así como de otro motor eléctrico con 115 CV, lo que da como resultado una potencia de 204 CV. La fuerza se gestiona a través de una transmisión automática e-DSG de seis velocidades.
El paquete de baterías es de 19,7 kWh de capacidad, un tamaño mucho mayor que en el anterior, y que da para recorrer hasta 100 kilómetros en modo cero emisiones. Se puede recargar a hasta 100 kW de potencia y en menos de media hora.
Esta mejora en el tamaño del componente se espera que permita bajar de los 0,9 litros por cada 100 kilómetros que ha venido homologando el Golf híbrido enchufable hasta ahora, en la versión más eficiente de las dos ofrecidas.
Más potente todavía es el Volkswagen Golf GTE, de 272 CV de potencia y con una batería del mismo tamaño que la opción básica, por lo que la autonomía real bajará algo de la que se anuncia con tres dígitos.
Estas versiones de momento no tienen precio fijado, pero lo harán muy pronto. Como referencian, podemos utilizar los precios del Golf anterior al restyling, que se vende por unos 43.000 euros en el caso del PHEV de acceso, y desde 44.000 euros si hablamos del GTE.