Cada vez hay más coches eléctricos en todos los segmentos, pero el nicho de los todoterrenos es todavía poco dado a las baterías (aparte de las pick-ups que se venden en Estados Unidos). Ahora, acaba de llegar a nuestro mercado un todoterreno eléctrico puro, se llama Invicta Spartan y es una curiosa combinación de elementos que parecen de otro tiempo.
No hay más que verlo para darse de cuenta de que el Spartan es un coche vetusto, sencillo, tanto en diseño como en tecnología, y rudo. Está pensado como una herramienta de trabajo pura y dura, para lo cual también resulta fundamental que sea sencillo de reparar cuando sea necesario.
El exterior y el interior del MWM Spartan EV están creados "pensando en primer lugar en la funcionalidad". El diseño exterior tiene "un característico aire vintage", con volúmenes muy cuadrados y voladizos cortos tanto en el eje delantero como en el posterior. Sí destacan sus cotas todoterreno con unos generosos ángulos de entrada y salida.
Es un auténtico todoterreno y prueba de ello es el sistema de tracción 4x4 que puede enviar su potencia al eje delantero, al trasero o a ambos. Además, cuenta con reductora para superar obstáculos especialmente complicados. Dice Invicta que es un "aliado perfecto" para empresas de jardinería, agrícolas, forestales o de minería subterránea.
Lo que sí está claro es que hay pocas concesiones al confort. Es un coche nuevo, aunque no lo parezca. El habitáculo es bastante estrecho, aunque eso no es lo peor. El chasis del salpicadero está a la vista, igual que los paneles de las puertas y sus respectivos tornillos y bisagras, e incluso el marco tubular de los pilares A. Como aislante de ruido (o como decoración) las puertas tienen una especie de plástico y textil.
Eso sí, tiene una pantalla digital en el centro que hace las veces de cuadro de instrumentos y muestra la velocidad instantánea, nivel de carga en la batería, potencia/recuperación, etcétera. La marcha de avance se elige con un pulsador más próximo al copiloto que al conductor.
Un propulsor eléctrico con 163 CV de potencia
El Spartan es totalmente eléctrico. Su motor tiene 163 CV (120 kW) de potencia y un par de 600 Nm. Para que el motor no se sobrecaliente ni siquiera en duras condiciones de trabajo, tiene un circuito de refrigeración que refrigera hasta 10 litros de agua por minuto.
El motor se alimenta de una batería de ion-litio con 63 kWh de capacidad que ofrece hasta 262 kilómetros de autonomía. La mayor parte de la batería va situada bajo los asientos traseros y tiene otros dos módulos en ambos laterales del vehículo. Tiene recuperación de energía con tres niveles distintos: autopista, campo y ciudad.
Espera a ver su precio
Dada la sencillez del vehículo, podría pensarse que tiene un precio acorde, modesto. No exactamente. Cuesta 58.302 euros antes de posibles ayudas públicas. Está homologado como vehículo N1, así que puede tener hasta 9.000 euros de ayudas del Plan Moves III. Con las promociones de la marca y las ayudas ya descontadas, su precio es de 44.902 euros.
Está disponible en cuatro colores (blanco, negro, verde y marrón) y tiene garantía de 3 años o 100.000 kilómetros para el vehículo y cinco años para las baterías.
Opcionalmente se puede pedir un cabrestante Warn, estribos reforzados con dos vigas transversales, una escalera y la baca, fabricados con los mismos robustos materiales.