Ya sabemos prácticamente todo lo que hay que saber sobre el Renault 5 eléctrico. Conocemos su aspecto gracias al prototipo R5 que se mostró en 2021. Conocemos sobre qué plataforma se construirá, la CMF-B EV. Sabemos qué fábrica lo ensamblará, la de Douai y cuándo arrancará su comercialización, en 2024. Incluso se conoce cuál será su precio base, entre los 20.000 y los 24.000 euros. Todos estos anuncios iniciales están sujetos a los cambios que exijan la tecnología, la producción y el marketing, por supuesto. Sin embargo, queda una gran incógnita por resolver: su nombre final, que no debería reemplazar el nombre de su predecesor. Las recientes presentaciones de nombres ante el INPI (Instituto Nacional de la Propiedad Industrial de Francia) podrían revelar algunas pistas sobre este enigma.
En agosto de 2022, este instituto registró como definitivo el nombre Air5 presentado por Renault tres meses antes. Esta designación se establece tanto para una categoría de vehículos terrestres como la de sus repuestos correspondientes. La adopción de este nombre en un vehículo de serie podría estar relacionada con que el prototipo equipaba un techo solar que se inspiraba en el techo de tela del original. Sin embargo, el Renault Air5 podría ser simplemente la variante descapotable del modelo base que se ofrece con techo fijo y que tendría otro nombre.
Anteriormente, Renault también había presentado el nombre 5Ever para referirse a este nuevo coche. Probablemente sea un nombre en clave ya que hace eco del nombre 4Ever utilizado internamente para el desarrollo del futuro R4, también eléctrico, que se mostrará en el Salón del Automóvil de París 2022 el próximo mes de octubre. Sin embargo, entre todos estos nombres, hay una pista que parece ser común y convertirse en la más clara para la designación del próximo R5: la que establece un juego de palabras que permite integrar el número 5 en un nombre con alcance internacional, y que, por lo tanto, será en inglés.
En el Salón de París también estará presente una variante deportiva basada en el Renault 5 original. Filtrado su nombre a partir de su registro en el Instituto Nacional de la Propiedad francés, el Renault 5 Turbo 3E se basa en la carrocería clásica tradicional vitaminada por los anchos pasos de ruedas y complementada por un alerón y difusor de gran tamaño.
También es interesante destacar que Renault está realizando pruebas del sistema mecánico del Renault 5 camuflado dentro de la carrocería de un Clio, aprovechando que la generación actual de este modelo se basa en la plataforma CMF-B, que sirve de base para la evolución eléctrica que supone la nueva arquitectura del futuro Renault 5.
En este punto cabe detenerse sobre un producto de marketing lanzado por Renault que también puede dar una pista sobre su futuro nombre. Al más puro estilo retro, el reproductor de casete inspirado en el R5 recientemente comercializado por Renault se llama Player5. Las apuestas siguen abiertas, pero las pistas se van estrechando.