Después de la enorme expectación generada por la marca de scooters eléctricos, Ola Electric, esta anuncia hoy una importante nueva ronda de financiación con una valoración poco habitual en una firma de reciente creación, pues sus fondos adquiridos se elevan hasta los 200 millones de dólares, alcanzando así una valoración total de más de 3 mil millones de dólares. Unas cifras que elevan a la marca hasta el auténtico Olimpo del mercado de scooters y movilidad eléctrica.
La compañía ya saltó a la palestra hace escasas semanas debido a su desbordamiento de ventas sobre sus dos únicos modelos presentes en su gama actual: el S1 y el S1 Pro. En aquel momento se superaron todas las expectativas con estos modelos, ya que durante las primeras 12 horas las ventas alcanzaron unas cifras de 80.000 unidades totales, lo que supone aproximadamente las cifras trimestrales de una marca como NIU. Una de las respuestas que se buscaron a este desmesurado nivel de pedidos, fue que apuntaba directamente sobre uno de los mercados con más clientes potenciales, el indio.
Esta ha sido una compañía que ha dado mucho de qué hablar en los últimos meses, pues ya supimos sobre su intención de contratar exclusivamente a mujeres para llevar a cabo su fabricación en la factoría de Bangalore, India. Esto supondrá un total de 10.000 contratos, con los que espera lanzar al mercado más de 10 millones de vehículos eléctricos al año. Desde Ola Electric llevaron a cabo una inversión total de 330 millones de dólares en dicha fábrica, incorporando los servicios de apoyo de 3.000 robots, y siendo completamente funcional en tan sólo 6 meses de construcción.
La última inversión obtenida de 200 millones de dólares se suma a los 150 millones de dólares generados por la compañía con motivo de la infinidad de reservas de sus dos vehículos S1 y S1 Pro. La suma total de estas cantidades será utilizada directamente para expandir la producción de la fábrica de FutureFactory, así como impulsar con mayor determinación el desarrollo de vehículos eléctricos firmados por la marca, algo que según el propio fundador de la empresa espera que suceda en los próximos años.
La fábrica de Ola Electric será la mayor factoría de motos del mundo.
Una de las grandes ventajas que ha supuesto esta marca sobre la oferta ya existente de otras firmas en el mercado indio, es que mientras sus competidoras han centrado su oferta en pequeños ciclomotores de bajas velocidades y autonomías escasas, mucho más específicas para la movilidad estrictamente urbana, desde Ola Electric han lanzado unos vehículos que compiten de tú a tú con las actuales motocicletas de 125cc movidas por gasolina. Un movimiento que ha hecho que muchos clientes potenciales se decidan a sustituir su contaminante vehículo por este mucho más eficiente y con mayor capacidad de ahorro económico. Esto supondrá un descenso en la cantidad de emisiones de CO2 sobre las principales capitales del país, lugar en el que sus habitantes recurren mucho a este tipo de vehículos.
Ola Electric insta a los consumidores, y a la industria en general, a comprometerse para que en el año 2025 dejen de venderse todo tipo de ciclomotores de dos ruedas movidos por gasolina. Este proyecto lo denominan "Misión Eléctrica", algo que esperan que resulte notablemente efectivo gracias a esta gran ronda de financiación, así como a sus generosas cifras de ventas, algo que quieren que sirva como motivación para clientes y otros fabricantes.
Los niveles de capacidad de fabricación que posee la marca actualmente esperan que se multiplique una vez se expanda su red comercial a nivel mundial. La compañía espera hacer efectivo dicho desembarco en otros mercados, como el alemán y el francés, para principios de 2022, mientras que el inglés y el español vendrán seguidamente.