La recarga es utilizada por muchos contrarios del coche eléctrico como una de las principales armas para criticar la movilidad sostenible. Sí, es cierto, el procedimiento y la compatibilidad es algo que tiene que mejorar, al igual que el excesivo y variado número de procedimientos diferentes por parte de las empresas que explotan los servicios. No hay ninguna duda que la recarga de Tesla es la mejor, la más fiable y la que más seguridad aporta a sus clientes. A esa vasta red pronto podrían sumarse los primeros puntos de carga inalámbrica. Tesla acaba de presentar unas patentes muy gráficas para un sistema completamente nuevo.
Si echamos la vista atrás descubriremos algunas declaraciones de Elon Musk criticando la carga inductiva o carga sin cables. Esta no sería la primera vez que el presidente de Tesla se contradice a sí mismo. Sin embargo, hace ya un año surgieron los primeros rumores sobre un posible desarrollo por parte de los ingenieros de Austin. A finales del año pasado la compañía confirmó oficialmente esos trabajos. Un sistema que hoy está más cerca de hacerse realidad gracias a las nuevas patentes registradas bajo el nombre de: “Estimación de parámetros para carga inalámbrica”. No una, sino cuatro solicitudes.
Un sistema fiable, rápido y muy fácil de utilizar
Cada una de esas partes resulta esencial para el conjunto. Desde un medidor de temperatura para aplicaciones de carga sin cables, pasando por un interruptor de cortocircuito, hasta la estimación de los parámetros o la topología del circuito de carga inalámbrica y métodos de fabricación relacionados. Todos y cada uno de ellos registrados en la web de patentes a nombre de Tesla. El hecho que los ingenieros de la compañía acaben de dar los primeros pasos para registrar el sistema estandarizado no significa que su llegada esté próxima o que ni siquiera acabe haciéndose realidad. Tesla se garantiza así la prioridad de uso y la propiedad intelectual.
Lo que sí demuestran estas solicitudes es que Tesla quiere seguir ampliando los límites de su propia red. Los usuarios de coches eléctricos valoran a los Supercargadores y Cargadores de Tesla como los mejores del mundo por su fiabilidad, facilidad de uso y potencia. Rara vez una estación o un punto de la red de carga de Tesla está inoperativo, algo que no puede decirse del resto de empresas que explotan los servicios de carga para vehículos eléctricos. Si bien esta tecnología promete revolucionar el sistema de carga, todo apunta a que será especialmente práctica en espacios domésticos, donde los clientes no tendrán que hacer tan complicadas instalaciones.
En sí el funcionamiento del sistema es de lo más sencillo e intuitivo. No es la primera vez que lo vemos. En Estados Unidos, bajo la financiación de Ford, se han estudiado calles completas con sistemas de carga inductiva. En sí el procedimiento es de lo más sencillo. Basta aparcar el coche encima de la estación de carga y por sí solo, sin la presencia de cables, el coche empieza a recuperar energía. Actualmente este sistema es cada vez más empleado por los teléfonos móviles. Los coches más modernos llevan plataformas de carga inalámbrica que no necesitan de un cable para recuperar la batería. Es posible que Tesla dé algún avance adicional el próximo 10 de octubre. Día en el que está programada la presentación del Robotaxi.
