Hace apenas unos días, Bentley hacía saber que ya tenían encarrilado el diseño de su primer coche eléctrico. Este, teóricamente ya tenía una fecha firme para su inicio de producción: a lo largo de 2025. Sin embargo, a través de una nueva información, se ha podido saber que la firma británica retrasa su llegada varios meses, adentrándose así en el 2026.
De esta manera, toda la hoja de ruta publicada hace unos años (en 2022) sufrirá también un retraso. Recordemos que en 2025 debería llegar el primer eléctrico, pero, de forma continuada, irían llegando nuevos modelos a razón de un vehículo eléctrico por año hasta 2030, formando así una gama compuesta por cinco alternativas. Este plan parece no haber modificado su intención, aunque sí lo hará significativamente en cuanto a fechas.
Se retrasa la hoja de ruta marcada por Bentley
Tanto ha sido el mencionado retraso que el primer coche eléctrico de Bentley no se dará a conocer hasta la segunda mitad del año 2026 (posiblemente durante el verano), mientras que sus entregas no darán el pistoletazo de salida hasta finales del mismo año. El resto de modelos eléctricos también retrasarán su llegada, siendo el último de los cinco (originalmente fechado para 2030) el que más sufrirá este cambio y no hará acto de aparición hasta el 2033. Ese año será cuando la marca se declare oficialmente como empresa 100% eléctrica.
No obstante, para remediar este cambio en las fechas, Bentley seguirá trabajando en reducir su media de emisiones de carbono mediante la adopción de mecánicas híbridas enchufables. Concretamente, la marca está desarrollando variantes PHEV para los bloques V8 y W12 de gasolina con los que ya cuenta en el catálogo.
Varios directivos de la compañía admitieron equivocarse en sus pronósticos sobre la acogida de los híbridos enchufables. Según ellos, estos caerían en ventas a partir de mitad de esta década, algo que no prevén que llegue a suceder hasta principios de la siguiente. Contrariamente, esperan que su demanda crezca significativamente en los próximos años. Con ello, Bentley invertirá varios “cientos de millones de euros” adicionales en esta tecnología.
Según indican desde Autocar, el principal responsable de este cambio en las fechas ha sido el retraso sufrido en el desarrollo de la plataforma PPE. Esto también ha supuesto varios quebraderos de cabeza para otras firmas del Grupo Volkswagen, tales como Porsche con el Macan EV o Audi y el recién presentado Q6 e-tron.
Sin embargo, no todo es negativo. Adrian Hallmark, director ejecutivo de la compañía, afirma que este cambio de fechas será beneficioso, ya que permitirá que el coche incluya “mejores funciones autónomas de las que disfrutaría el modelo de llegar en 2025”. Además, esperan también perfeccionar la tecnología de frenada regenerativa.
Por último, es conocido que Bentley está desarrollando alternativas eléctricas para modelos como el Continental GT y GTC, pero también para Bentayga y Flying Spur. No obstante, el primer eléctrico que llegará a sus filas (en el 2026) será un modelo totalmente nuevo en todos los asepctos y con un diseño y una personalidad propia.