La división de vehículos eléctricos y software de Renault, llamada Ampere, ha anunciado su hoja de ruta para los próximos años detallando sus objetivos, las estrategias de producto, los volúmenes de venta a los que aspira y el margen de beneficio que prevé tener. También ha hablado sobre la manida paridad de precios entre los coches eléctricos y los de combustión, que prevén alcanzar en 2027 o 2028 la primera y segunda generación de vehículos eléctricos del segmento C.
Ampere es una de las dos divisiones que resultaron de la escisión de Renault a finales del año pasado. La otra es Horse, enfocada en los vehículos con motor de combustión, que tiene su sede en España.
La compañía ha publicado una hoja de ruta para la próxima década en la que detalla los planes y objetivos de su negocio. Las premisas principales son vender un millón de coches eléctricos en 2031, reducir los costes de producción en un 40% y aumentar la cuota de mercado.
Ofensiva de modelos eléctricos
Renault quiere abordar principalmente los segmentos B y C, los coches urbanos medianos y compactos, de los cuales se espera que representen el 75% del mercado europeo de vehículos eléctricos en 2023. No obstante, su oferta no se reducirá solamente a esos dos segmentos.
La ofensiva de producto de Renault contempla siete modelos eléctricos de aquí a 2031: Megane E-Tech, Scenic E-Tech, Renault 5, Renault 4, Legend y dos vehículos adicionales más de los cuales no han dado pistas.
De los nuevos, el primero en llegar será el Scenic E-Tech eléctrico, que saldrá al mercado a principios del próximo año con un precio de entrada en torno a los 40.000 euros. Será un monovolumen de batería con 625 kilómetros de autonomía WLTP.
El año que viene también llegará el nuevo Renault 5, que se presentará en el primer trimestre de 2024 y que supone el renacimiento de un modelo icónico. Tendrá unos 400 km de autonomía y costará alrededor de 25.000 euros, precio equivalente a los híbridos del segmento B. Por su parte, el Renault 4 se lanzará en 2025 y será "la reinterpretación de un coche universal para la era eléctrica".
Una de las novedades más importantes es el Renault Legend, un sucesor del actual Twingo anunciado hoy mismo, un vehículo urbano con un consumo de sólo 10 kWh/100, fabricado en Europa y con un precio de entrada inferior a 20.000 euros (sin contar subvenciones).
Además de su propia gama de vehículos, Ampere también está diseñada para ser una plataforma tecnológica y poder ofrecer su músculo productivo a otras marcas más allá de Renault. De hecho, producirá al menos dos modelos para Alpine, el próximo Nissan Micra, un C-SUV para Mitsubishi Motors y brindará apoyo para la electrificación de Dacia.
Igualdad de precios en 2027/2028
El objetivo de Ampere para el año 2027 o 2028 es reducir un 40% los costes entre la primera y la segunda generación de vehículos eléctricos del segmento C, con los sucesores del Megane-E-Tech y el Scenic E-Tech, preservando los márgenes de beneficio. Para esa fecha esperan conseguir una equidad de precios entre los coches con motor de combustión interna y los eléctricos.
Para alcanzar esta disminución en el precio del vehículo, reducirán un 50% el coste de las baterías (a igualdad de autonomía) y un 25% el grupo motopropulsor del vehículo. Esto último incluye el motor, la transmisión, el inversor, etcétera.
También reducirán un 25% el coste de la plataforma del vehículo y un 15% el de la carrocería, además de recortar un 50% los costes de fabricación y logísticos.
La idea de Renault y Ampere es "democratizar los vehículos eléctricos en Europa". El objetivo es vender 300.000 coches eléctricos al año en 2025 y 1 millón de eléctricos en 2031, alcanzando una cuota de mercado entorno al 10%.
Tecnología y software
Ampere lanzará el primer 'Software-Defined-Vehicle' (SDV) en 2026. Esto significa tener vehículos creados alrededor del software y no al revés, como ocurre actualmente, lo que supone brindar una experiencia nueva.
Para ahorrar tiempo y costes, además de reducir el margen de error a la hora del desarrollo, reforzará sus asociaciones con Google y Qualcomm Technologies, dos de los mayores nombres en la industria tecnológica.
Además de los negocios tradicionales con los vehículos, Ampere explotará el negocio del software y los servicios relacionados con otras marcas como Alpine, Nissan y Mitsubishi Motors.