La división de alto rendimiento de Volvo, Polestar, considera que el mercado chino será el principal destino de sus lujosos coches deportivos con propulsión eléctrica. Según Thomas Ingenlath, jefe la marca en China, como mínimo la mitad de los vehículos que venda Polestar irán a parar al mercado chino, mientras que la porción restante de las ventas se las repartirán entre Europa y Estados Unidos.
Según las declaraciones realizadas por el directivo de la marca en durante el Salón de Guangzhou, que abrió sus puertas el pasado fin de semana, "actualmente no hay una variedad suficiente (de coches eléctricos) para los compradores". "Necesitamos ofrecer una gama diversa de productos si queremos que la electrificación sea atractiva para los clientes", afirmó.
Polestar planea lanzar 3 nuevos modelos eléctricos de aquí a 2021. El objetivo inicial de Polestar es el de fabricar entre 50 y 100 mil coches por año, todos ellos basados en sus tres primeros modelos: los Polestar 1, 2 y 3. La producción, por el momento, correrá a cargo de la factoría china que tiene la marca en Chengdú, una de las tres ciudades más pobladas al oeste del país.
El primer modelo de la marca, el Polestar 1, es un lujoso y deportivo sedán híbrido enchufable con 600 CV de potencia que se empezará a entregar a mediados de 2019. El segundo, llamado Polestar 2, es un coche compacto eléctrico llamado a competir en el mismo segmento del mercado que el Tesla Model 3 a partir de 2020. El Polestar 3, tercero en discordia, será también 100% eléctrico y se espera que llegue al mercado antes de 2022. Los planes de la marca pasan por comercializar todos sus coches con un servicio de suscripción mensual sin compromiso de permanencia.