La movilidad sostenible es un objetivo común. Las normativas y legislaciones actuales han provocado un cambio en el paradigma del motor en el viejo continente. Empresas de componentes y fabricantes de coches unen fuerzas para afrontar esta nueva movilidad de una forma más sostenible, tanto económica como medioambientalmente hablando. Ejemplo es el nuevo acuerdo entre BASF y Porsche.
BASF es una de las mayores empresas químicas del mundo con representación en muchos países repartidos por los cinco continentes. Un gigante de la industria que es el líder mundial de materiales activos de cátodos de alto rendimiento. Palabras que encajan perfectamente con Porsche. Por ese motivo, la empresa ha sido seleccionada por Cellforce Group, empresa conjunta entre Porsche y Customcell. Ambas marcas firmaron recientemente un acuerdo de colaboración para fabricar estas baterías para deportivos y coches de competición.
El proceso de investigación y desarrollo es un proceso constante. Esta alianza llega con la intención de producir una nueva generación de pilas de alto rendimiento que mejoren la densidad y la velocidad de carga, lo que también significa una mejor autonomía. Los futuros Porsche eléctricos, como el Porsche Taycan, se beneficiarán de ello, siendo capaces de lograr mejores prestaciones sin lastrar los consumos o la autonomía.
Un Porsche Taycan eléctrico recarga en un puesto de carga rápida.
Ambas empresas se muestran muy satisfechas con el acuerdo alcanzado. En palabras de Michael Steiner, miembro de la Junta Ejecutiva de I+D de Porsche AG, «como fabricante de automóviles, Porsche aspira a ser neutral en CO2 para el año 2030. En este sentido de baja huella de CO2 el reciclaje de circuito cerrado y la sostenibilidad están cada vez más en un primer plano».
Por su parte, Markus Kamieth, miembro de la Junta de Directores Ejecutivos de BASF SE, ha dicho que los materiales activos de cátodo de BASF «se adaptarán a las necesidades específicas de Porsche aprovechando nuestras sólidas capacidades de I+D». Además, serán líderes por bajo impacto de CO2 gracias a un proceso de fabricación eficiente, a la alta proporción de energía renovable, a la integración ascendente en las materias primas clave, así como a la ruta corta de transporte a lo largo de la cadena de valor.
En el proceso de producción BASF podrá gran parte de su atención en reciclar los residuos de producción de las celdas con la intención de cerrar el ciclo y reducir aun más la huella de emisiones. Cellforce Group será la encarga de producir estas nuevas baterías de. Se espera que su planta de producción de baterías en Tübingen, Alemania, comience a operar en 2024 con una capacidad inicial de al menos 100 MWh por año, impulsando 1.000 vehículos deportivos y de alto rendimiento.